Odarda impulsa un proyecto de Ley para evitar que ARSA venda agua a granel
La legisladora afirmó que "debería ser gestionada en beneficio del interés general y no como un recurso comercializable".
La legisladora Magdalena Odarda propone prohibir la venta de agua de ARSA. Foto Archivo
A principios de agosto, la empresa Aguas Rionegrinas había anunciado la compra de dos camiones «destinados a una nueva unidad de negocios que contempla la venta de agua a granel a domicilio«. La legisladora rionegrina Magdalena Odarsa impulsa un proyecto de ley para prohibir la venta que plantea la empresa ARSA.
«La reciente iniciativa de permitir la venta de agua a granel plantea serias dudas sobre el futuro del acceso al agua, un bien fundamental y derecho humano inalienable, especialmente en un contexto de emergencia hídrica y cambio climático», afirmó en un comunicado la legisladora del bloque Vamos con Todos.
Presentó un proyecto de Ley con el objetivo de asegurar que «el acceso al agua permanezca como un derecho humano y no sea objeto de mercantilización». Esa iniciativa busca prohibir la exportación de agua garantizando su disponibilidad para el uso local y la preservación de este recurso esencial.
«La empresa estatal Aguas Rionegrinas Sociedad Anónima anunció la apertura de licitaciones para adquirir equipos y vehículos destinados a la venta de agua a granel, con una inversión inicial de 120 millones de pesos», aseguró Odarda.
Agregó que ese anuncio «genera inquietud dado que el agua, reconocida por la Constitución Nacional y diversas convenciones internacionales como un derecho humano fundamental, debería ser gestionada en beneficio del interés general y no como un recurso comercializable».
Odarda señaló la crisis hídrica que atraviesa Río Negro
La legisladora Odarda también afirmó que «Río Negro enfrenta una crisis hídrica severa, declarada en varias ocasiones debido a la sequía persistente y la inadecuada distribución del agua. Los informes de organismos como el INTA y la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas confirman una disminución en la disponibilidad de agua, afectando tanto a la población como a las actividades productivas vitales para la región».
Es por eso que señala que «la propuesta de comercializar agua en lugar de priorizar su distribución equitativa y sostenible resulta particularmente preocupante».
La propuesta legislativa subraya la necesidad de proteger el agua «como un bien común, esencial para la vida y el desarrollo sostenible», y que «es fundamental que el manejo del agua esté guiado por principios de justicia social y equidad, priorizando el bienestar de la población sobre los intereses comerciales».
Odarda insistió en que «se busca garantizar que el agua en Río Negro continúe siendo un recurso gestionado con responsabilidad y en beneficio de toda la comunidad. La propuesta es un llamado a la reflexión sobre cómo se deben tratar los recursos naturales y destaca la importancia de mantener el agua como un derecho humano esencial y no como una mercancía».
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