Neuquén exige a restaurantes que muestren el menú en la puerta y con los precios
Es una de las exigencias que se puso en práctica en la ciudad de Neuquén con el objetivo de que los clientes tengan información previa del costo que tendrá el servicio. No todas las normas vigentes en la gastronomía se cumplen como la que eliminó los saleros.
Dentro de los próximos seis meses, todos los comercios gastronómicos de la ciudad de Neuquén deberán exhibir, en el ingreso a sus locales, el menú que ofrecen con los precios de cada plato actualizados de acuerdo a los índices inflacionarios de cada mes.
El 25 de septiembre de este año, se publicó en el Boletín Oficial de la municipalidad de Neuquén, el decreto 905 que da curso a la obligatoriedad. Los comercios tienen 180 días para implementar la disposición dispuesta por la ordenanza 14.554, sancionada por el Concejo Deliberante el 31 de agosto.
“La norma fue sancionada en razón al contexto inflacionario que está atravesando el país, e intentar ser una herramienta útil para el consumidor, a fin de que pueda conocer el menú gastronómico y determinar si los precios son acordes a su presupuesto”, dice el texto del decreto firmado por el intendente Mariano Gaido.
El menú con los precios actualizados de acuerdo a los índices inflacionarios podrán ser exhibidos en formato papel en un atril o mediante la utilización de un código QR o “forma digital similar”.
Al momento de discutirse el proyecto en el recinto del Deliberante, se tuvo en cuenta que en la actualidad, existen muchos locales gastronómicos que ya cuentan con su menú digital, “con lo cual incorporar el precio de cada plato no significaría una gran tarea”.
Entre los objetivos de esta norma se destacan que el cliente no estaría obligado a ingresar al comercio para consultar alternativas gastronómicas para degustar y sus precios, “podría definirlo con anterioridad”.
La subsecretaría de Comercio de la municipalidad de Neuquén es la autoridad de aplicación, encargada de dar cumplimiento a esta normativa.
Una larga historia
Desde hace una década, el Concejo Deliberante viene sancionando ordenanzas para regular la transparencia comercial hacia sus clientes, pero no siempre fueron causas que dieron buenos resultados.
En octubre de 2014, el decreto 933 promulgaba la ordenanza 13.074 que establecía la obligatoriedad de que, a partir de diciembre de ese año, los locales gastronómicos debía contar con un menú en Braille y macrotipo para las personas ciegas y disminuidas visuales. En la actualidad, existen muy pocos comercios que cuentan con esta alternativa y las sanciones dispuestas tampoco son aplicables.
Otra historia. En 2017, los concejales aprobaron a propuesta del bloque de UNE-Neuquén puede una norma que establece la “prohibición de la colocación a la vista y / o al alcance de los clientes el condimento de la sal, en cualquiera de sus presentaciones. Sólo a pedido expreso del cliente, podrán agregar el salero en la mesa de comensales”.
De acuerdo a esta norma, los establecimientos gastronómicos deben contar también con la oferta para los clientes que lo requieran, de sal dietética (con bajo contenido de sodio), “que no contengan una cantidad superior a los 120 mg de sodio por cada 100 gramos del producto”.
Pero además, se establecía que las cartas con las ofertas de la cantidad de platos que tienen a la venta deben contener la leyenda “el consumo de sal en exceso es perjudicial para la salud”.
De estas ordenanzas poco se cumple. Solo algunos locales, los más pequeños, cuentan con menú en braille.
El salero en los locales ya no existe, pero en casi ningún lugar, al consultar el menú, se puede ver la inscripción nutricional sobre el alto contenido de sodio de los alimentos que se consumen.
Sí, hay que destacar que existen locales gastronómicos que brindan la posibilidad de platos sin sal.
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