Mucho ruido y pocas nueces: ¿en qué quedaron las promesas de Javier Milei?
La Ley de hojarascas, el Pacto de mayo y el paquete anti-casta son algunos de los anuncios que hizo el Presidente, pero que jamás se concretaron. Con el debate del Presupuesto a la vuelta de la esquina, cuesta imaginar que esos temas prosperen este año.
¿Se acuerdan de la Ley de Hojarascas? ¿Y el Pacto de Mayo? ¿Qué habrá pasado con la ley anti-casta? ¿Y los capítulos de la Ley bases que quedaron en el camino y que el gobierno de la Libertad Avanza prometió volver a presentar? Faltan dos meses para que culmine el período de sesiones ordinarias y muchas de las promesas del presidente Javier Milei quedaron en el camino.
El 1° de marzo, cuando Milei habló ante la Asamblea Legislativa sorprendió con el anuncio del Pacto de Mayo, que finalmente se selló en julio. Como fuere, el acta firmada contiene 10 puntos que, según prometió el gobierno libertario, luego se traducirían en proyectos de ley que pasarían por el Congreso.
¿En manos de quién quedaría ese trabajo? Del Consejo de Mayo, un órgano integrado por representantes del Poder Ejecutivo, los gobernadores, el Congreso, organizaciones sindicales y el empresariado. Pero lo cierto es que ese consejo sigue sin conformarse. Por tanto, no hay quien trabaje en la traducción de los 10 puntos del acta en proyectos de ley.
El primero de marzo, Milei también hizo otra promesa que incumplió. Anunció que enviaría un paquete anti-casta que jamás llegó. ¿Qué incluía? La eliminación de las jubilaciones de privilegio del presidente y vice. Nobleza obliga, el tema fue debatido en Diputados, en el marco de la ley impulsada por la oposición para modificar la fórmula previsional (que luego Milei vetó). Pero lo cierto es que el ítem no prosperó. Si bien fue la oposición la que puso el tema sobre la mesa, LLA votó a favor de ese artículo, pero por falta de votos la propuesta naufragó. Días después, el Presidente anunció que renunciaba a la jubilación de privilegio.
Ese paquete anti-casta de Milei también incluía una reforma sindical. Según anunció el Presidente en marzo, los mandatos quedarían limitados a cuatro años, con un tope de una sola reelección. El oficialismo jamás envió ese texto: quien recogió el guante fue la UCR, que empuja un proyecto que incluye ese y otros capítulos.
¿Y la ley de hojarascas? Desde junio el gobierno, con Federico Sturzenegger a la cabeza, promete el envío de una ley que deroga o modificar leyes “obsoletas” o que implican trabas a “la libertad económica”. Si bien el ministro de Desregulación y Transformación del Estado dio algunos adelantos del contenido del texto, y en su entorno aseguran que la iniciativa ya está lista, todavía no fue enviada al Congreso.
Allá por enero de este año, cuando comenzó el debate de la Ley bases, se suprimió el capítulo de reforma política (entre tantos otros). En esa oportunidad, los libertarios se comprometieron a insistir con el tema una vez que inicie el período de sesiones ordinarias.
Entre los temas que más le interesaban tratar al gobierno se encontraba la eliminación de las PASO. Los funcionarios del PEN, con Guillermo Francos a la cabeza, insisten con que las primarias tienen un costo muy alto y que son muy pocos los espacios que las usan. Como fuere, el texto jamás se presentó. Quizás, la decisión se tomó luego de tantear el terreno y registrar que las chances de que la propuesta prospere son muy bajas.
Fin de año recargado
Cuesta imaginar que, para lo que resta del año, avancen las promesas incumplidas. Es que al Congreso le aguardan (según calcula el Gobierno) ocho semanas de trabajo intenso. Ese es el tiempo que tomaría el debate del Presupuesto 2025. La iniciativa, que Milei presentó en el Congreso el domingo anterior, comenzará a tratarse en comisión el 1° de octubre.
A esto hay que sumarle que el oficialismo pretende avanzar, antes de que inicie el año electoral, con la sanción de la Boleta Única de Papel y el proyecto de Ficha Limpia, que prohíbe candidatearse a cargos nacionales a quienes tengan alguna condena por corrupción.
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