Milei no quiere enviar ministros a Diputados para explicar la Ley Ómnibus y profundizó las diferencias

A pocas horas del inicio del debate sobre la «ley ómnibus», la incertidumbre se apoderó de la Cámara de Diputados. El Gobierno rechazó enviar ministros para explicar el extenso proyecto, generando malestar y críticas. Por su parte, la oposición reclamó la presencia de figuras clave del Gabinete, mientras en la Casa Rosada proponen enviar subsecretarios y directores, o incluso exponer por videoconferencia. La situación política se complica, y el clima tenso se agrava con las polémicas declaraciones de Javier Milei.

El viernes pasado, las autoridades de la Cámara resolvieron convocar a la primera reunión informativa conjunta de las comisiones relevantes. Sin embargo, la incertidumbre persiste sobre quiénes representarán al Gobierno en la explicación del proyecto «Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos».

La nota oficial de la Comisión de Legislación General informó que «concurrirán funcionarios del Poder Ejecutivo, quienes podrán estar presentes o conectarse de forma remota». Esta modalidad no satisface a los diputados, quienes reclaman la presencia física de ministros para abordar los 664 artículos de la «ley ómnibus».

Fuentes parlamentarias revelaron que los pedidos de la oposición para la presencia de ministros obtuvieron respuestas evasivas. La mayoría de los ministros estarían renuentes a asistir, y solo algunos aceptarían participar de forma remota. En respuesta a las críticas, argumentaron que la ley no fue redactada por el Gobierno.

En la Cámara de Diputados, se demandó la presencia de Nicolás Posse (Jefe de Gabinete), Luis «Toto» Caputo (Ministro de Economía) y Sandra Pettovello (Ministra de Capital Humano) para explicar aspectos específicos de la «ley ómnibus». Según las fuentes, Economía ofreció enviar subsecretarios, y Capital Humano un subsecretario y dos directores; el resto no ha respondido.

La tensión política se incrementa en medio de este escenario incierto. Mientras tanto, el país espera claridad sobre el contenido de la «ley ómnibus» y la postura del Gobierno en este crucial debate parlamentario.

Milei disparó con frases explosivas y rechazó negociaciones: entre acusaciones de coimas, boicot y la falta de representación

La tensión política se agravó con las explosivas declaraciones del presidente en el inicio del debate sobre la «ley ómnibus». Acusaciones de coimas y la negativa a negociar con el Congreso generan un clima enrarecido. Mientras La Libertad Avanza enfrenta la falta de representación con solo 38 bancas en la Cámara baja y 7 en el Senado, el presidente desafía a la oposición.

El mandatario responsabiliza al Congreso por los últimos datos económicos desfavorables, afirmando que las «estupideces» legislativas afectan la licitación de bonos y contribuyen al aumento del riesgo país y del dólar. A pesar de la necesidad de aliados, Javier Milei eleva el tono de sus críticas a diputados y senadores.

En una entrevista en radio Mitre, Milei destaca el valor de contar con el respaldo de la UCR, el PRO y parte del peronismo para evitar que las medidas queden empantanadas. A pesar de la escasa representación de La Libertad Avanza en el Parlamento, el presidente defiende su programa de ajuste y reformas estructurales, rechazando la responsabilidad por la crisis en la política.

Milei arremetió contra la clase política, acusándola de querer fraccionar decretos para «coimear». Advirtió que se revisarán los flujos y stocks de los políticos, desafiando a que sus niveles de vida estén acordes con sus ingresos. Ante la pregunta sobre negociaciones políticas, el presidente niega cualquier tipo de negociación, aceptando solo sugerencias para mejorar.

En paralelo, el ministro del Interior, Guillermo Francos, también limitó la posibilidad de negociación política, argumentando la falta de tiempo para discutir leyes extensas. Ambas posturas reflejaron la determinación del gobierno de mantener una dirección única en el inicio del debate en Diputados.

Las declaraciones del presidente y del ministro del Interior coincidieron en la necesidad de «evitar demoras en la discusión, destacando la urgencia de inversiones» para evitar la paralización de la economía.

En este contexto, la disputa entre el kirchnerismo, que busca bloquear y demorar el debate, y la coalición opositora, que busca matizar algunos aspectos polémicos de la «ley ómnibus», promete intensificar la tensión política en el Congreso.

Con información de Infobae