Milei cerrará un fondo fiduciario: fue auditado por la Sigen por dar créditos «irregulares» a Pymes
El Gobierno de Javier Milei cerrará el Foncap tras una auditoría de la Sigen que detectó irregularidades en su gestión. Daba créditos a Pymes.
El Gobierno nacional, a través del Ministerio de Economía, anunció este martes el cierre del Fondo Nacional de Capital Social (Foncap), un organismo creado para financiar a instituciones que otorgan microcréditos a personas sin acceso a la banca formal. «Severas irregularidades», indicó el vocero Manuel Adorni.
El vocero presidencial, Manuel Adorni, dio a conocer la medida durante una conferencia de prensa, destacando que la decisión permitirá un ahorro de $100 millones mensuales.
La clausura del Foncap llega después de una auditoría realizada por la Sindicatura General de la Nación (Sigen) que reveló “severas irregularidades” en su funcionamiento.
“La Sigen llevó a cabo la auditoría y encontró una administración sobredimensionada que otorgaba créditos de manera discrecional y ejecutaba gastos por encima de lo necesario”, detalló Adorni.
El vocero agregó que el Foncap, creado en 1997 con el objetivo de promover el acceso a microcréditos productivos, no cumplió con sus metas y se caracterizó por una gestión deficiente. “Con 26 empleados, el Foncap otorgó apenas 20 créditos en el último año. No había un esquema de promoción efectivo al financiamiento de las pymes ni un mecanismo para verificar el cumplimiento esperado”, subrayó.
Además, Adorni mencionó que el organismo acumuló un historial de gastos desproporcionados y una falta de informes de gestión que evidencian la ineficacia de su administración.
“El cierre de este fondo es parte de la política del Gobierno de reducir gastos y optimizar recursos”, concluyó el vocero, enfatizando la necesidad de dirigir los fondos públicos hacia sectores que generen impacto tangible en la economía.
La medida se enmarca en el plan de ajustes impulsado por el presidente Javier Milei, conocido por su enfoque en la reducción del gasto público y su polémica referencia a la «motosierra» como símbolo de su política de recorte.
Con esta decisión, el Ejecutivo busca fortalecer la confianza en la gestión fiscal y reafirmar su compromiso con la eficiencia en el uso de los recursos del Estado.
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