Los insólitos y millonarios gastos por los que echaron a una funcionaria del gobierno de Javier Milei
Se trata de una subsecretaría del ministerio de Capital Humano que dejó su cargo por pedido de Sandra Pettovello.
Javier Milei y Sandra Pettovello. Foto: archivo.
Con escándalo de por medio, la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, le pidió la renuncia a quien era su subsecretaria de Gestión Administrativa de la secretaría de Niñez y Familia, Constanza Cassino, acusada de comprar una cafetera por casi dos millones de pesos y contratar un servicio de catering por otros tres millones.
La salida fue confirmada por la propia Cassino, que en una carta escribió: “Tengo el agrado de dirigirme a usted, a fin de presentar mi renuncia a partir del 31 de octubre de 2024, al cargo de Subsecretaria de Gestión Administrativa de Niñez, Adolescencia y Familia de la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia”.
La ahora exfuncionaria es abogada y había asumido en esa dependencia en agosto último, tras haberse desempeñado en el ministerio de Modernización del gobierno porteño durante la gestión de Mauricio Macri.
Las insólitas compras que eyectaron a una funcionaria del Gobierno y el posteo de Grabois
El portal TN indicó que el pedido de Pettovello fue luego de «tomar conocimiento de la situación relacionada con la cafetera», por la que abonaron, indicó el citado medio, $1.917.000.
La compra en cuestión se materializó el 21 de octubre. Se trata de una cafetera automática Philips Molinillo modelo EP 2231, que se puede conseguir por montos inferiores en páginas online. .
Respecto al catering, se supo que fue contratado para una jornada que organizó la secretaría de Niñez y Familia el 8 de octubre y que duró unas 8 horas, incluyendo desayuno para 50 personas, almuerzo para 100 y un «coffe break» para otras 50.
Ambas gestiones tomaron especial notoriedad cuando el dirigente social y exprecandidato presidencial, Juan Grabois, las expuso desde sus redes sociales en un posteo que tituló «los privilegios de Pettovello».
“El cafecito con espuma con sobreprecio ($1,917,000) y los triples del catering de Pettovello (3 palos sospechosamente redondos) se pagan con 6444 raciones de almuerzo según el PNUD, ese que esta rocha perfumada le niega a los pibes”, sostuvo, junto a las facturas que deban cuenta de las operaciones.
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