La “motosierra” en el Correo: dos intendentes de Río Negro salieron al cruce y piden que no cierren oficinas
Los jefes comunales de Cervantes y de Chichinales advirtieron sobre el perjuicio para sus vecinos.
empleados de Correo Argentino de Neuquén y Río Negro
El cierre de oficinas del Correo Argentino empezó a movilizar a intendentes rionegrinos, que advirtieron sobre el perjuicio para sus vecinos por los servicios que desaparecerían de las localidades con menos población en la provincia.
“La motosierra llegó a Cervantes”, reprochó Claudia Montanaro, jefa comunal del PJ que se expresó este miércoles ante el “retroceso” que significaría la decisión, basada desde su punto de vista en un modelo que levanta “banderas de humo de déficit, ñoquis, o argumentando y defendiendo lo indefendible”.
«Nos dejan hoy desprovistos de un servicio fundamental, que además nos brindaba comodidad para realizar todo tipo de trámites y lo más importante: nos daba independencia local y social”, sostuvo Montanaro a través de un mensaje público.
La intendenta aseguró que “si esta idea persiste, no solo es el cierre de la oficina de Cervantes, sino que comenzaran a correr los despidos masivos y los retiros voluntarios en toda la provincia de Río Negro”.
Por eso pidió al gobierno nacional “que logre recapacitar y entender que el ajuste jamás debería ser con el pueblo”.
Desde otro sector político, pero en sintonía al advertir sobre las consecuencias se expresó el intendente de Chichinales, Lucas González.
El dirigente radical dijo que las versiones sobre el cierre de la oficina local del Correo Argentino son crecientes y que prueba de eso fue la reciente propuesta al encargado del espacio para que acepte un retiro voluntario.
“Nos preocupa la situación laboral del empleado, pero además para nuestro pueblo es muy importante y necesario contar con este servicio, ya que no solo en la oficina se distribuyen cartas, sino que allí cobran nuestros jubilados a razón de cerca de 30 personas por día, o quienes reciben pensiones contributivas, se distribuyen las boletas de servicios, y todos los trámites de esa institución, por lo que su cierre significaría que nos tengamos que trasladar a Villa Regina”, describió González.
El ahorro sería de apenas un sueldo
El jefe comunal resaltó que en el caso de Chichinales, el supuesto ahorro pretendido es insignificante, porque “lo que paga el gobierno nacional es el sueldo del único empleado de la oficina, ya que funciona en un edificio de propiedad del municipio que se ha cedido para el funcionamiento de la oficina postal”.
González indicó que “se han iniciado las gestiones ante las autoridades correspondientes para evitar esta situación que nos preocupa y que entendemos que se debe evitar”.
“Le pedimos acompañamiento al gobernador Weretilneck y también hemos dirigido notas a referentes provinciales del partido del gobierno como la diputada Lorena Villaverde y el presidente de Primero Río Negro, Ariel Rivero”, puntualizó.
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