La crisis del FdT, más que inoportuna para Carreras y Weretilneck
El oficialismo rionegrino aparece con una imagen dual: cercano al kirchnerismo en el Senado y al mismo tiempo en alta sintonía con el presidente. El exgobernador dice que la postura ante el acuerdo con el FMI todavía no está definida.
La foto del encuentro del lunes también fue una señal de tranquilidad hacia el interior del partido.
El oficialismo rionegrino surfea las impredecibles olas del verano político nacional.
El 2021 cerró con un explícito acercamiento de Juntos Somos Río Negro al Frente de Todos en el Congreso. Y el 2022 amaneció bajo esa misma corriente, pero la reciente renuncia de Máximo Kirchner a la presidencia del bloque en Diputados alteró todas las proyecciones.
La velocidad con la que se precipitaron los hechos después del anuncio de un acuerdo con el FMI no permitió evitar una imagen dual para los máximos dirigentes del partido de gobierno en Río Negro.
La gobernadora, Arabela Carreras, estaba en Buenos Aires cuando se confirmó la salida del hijo de la vicepresidenta de la titularidad de la bancada. Apenas horas después despegó rumbo a Rusia, China y Barbados junto al presidente, Alberto Fernández, en una gira que hasta el momento reservó para ella un rol más protocolar que estratégico.
Al menos hasta ayer, nada se informó sobre beneficios directos que podría obtener Río Negro luego de los contactos con autoridades o empresarios de los países visitados.
La mandataria subió una foto en el Kremlin y retuiteó los posteos realizados desde las cuentas de Casa Rosada y del presidente Fernández. Una cercanía que fue más allá de la habitual cordialidad cultivada desde el 2019 para el vínculo con Nación.
Funcionarios cercanos a Carreras aseguraban ayer que cualquier lectura de una virtual alianza con el espacio político del presidente quedará desarticulada al regreso del viaje, cuando la gobernadora ofrezca una conferencia de prensa y detalle las gestiones realizadas para lograr inversiones en la provincia.
Si se cumple ese objetivo, Weretilneck estará un poco más aliviado, porque hasta el momento es alto el contraste entre la ubicación de la gobernadora y el acompañamiento en el Senado a las estrategias de la vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner.
El exgobernador tiene garantizada la continuidad en la presidencia de la Comisión de Agricultura, Ganadería y Pesca de la cámara alta, uno de los gestos lanzados por el kirchnerismo el año pasado para garantizar la adhesión del rionegrino en las votaciones cruciales.
Lo que negó ayer Weretilneck fue un encuentro personal con CFK en el Instituto Patria, tal como deslizó un columnista en una radio de Buenos Aires.
El líder de Juntos decidió tomar distancia de la crisis del FdT y repite por estas horas que su postura y la de los diputados Luis Di Giacomo y Agustín Domingo sobre el acuerdo con el FMI será anunciada recién después de conocer el proyecto que debe enviar el Ejecutivo al Congreso.
Carreras y Weretilneck se reunieron el lunes en Buenos Aires. El encuentro en el hotel donde habitualmente se aloja la mandataria sirvió para analizar precisamente cómo afectaría a Juntos la gira con el presidente en un momento de tanta ebullición, pero también para avanzar en asuntos domésticos.
El oficialismo rionegrino tiene previsto renovar sus autoridades el próximo 27 de marzo y si bien se descuenta que la gobernadora tendrá un cargo, resta resolver si será la única representante del gobierno en la conducción del partido o se abrirán espacios para otros funcionarios.
Las pretensiones de ministros y de intendentes ya están llegando a oídos de ambos y el desafío es llegar a la instancia decisiva sin herir -demasiado- ninguna susceptibilidad.
Comentarios