Juicio contra mapuches por usurpación en Villa Mascardi: qué pasó en la primera audiencia
En el arranque del juicio, la machi Betiana Colhuan Nahuel quedó apartada de la causa porque era menor de edad en 2017. Policías y personal del parque Nahuel Huapi dieron su testimonio.
El juicio por usurpación en Villa Mascardi tiene a integrantes de la lof mapuche Lafken Winkul Mapu como imputados. Foto: Marcelo Martinez
La primera audiencia del juicio por usurpación a dos predios de la Administración de Parques Nacionales en Villa Mascardi, que se inició en noviembre de 2017, tuvo una definición trascendental hoy ante del inicio del debate y es que el juez Hugo Greca dictó el sobreseimiento de la machi (líder espiritual) Betiana Colhuan Nahuel, integrante de la lof Lafken Winkul Mapu.
El juicio tuvo una antesala de fuerte custodia al Escuadrón 34 de Gendarmería Nacional en Bariloche y restricción al público y a la prensa, que solo pudo tomar imágenes de manera previa y seguir el debate por streaming, que continuó con Johana Colhuan, María Nahuel, Jésica Bonefoi, Gonzalo Coña, Ailén Tapia, Romina Rosas y Luciana Jaramillo como imputados.
La acusación se basó en más de un hecho, todos vinculados a la usurpación mediante “violencia y amenazas” de dos terrenos de Parques Nacionales ubicados junto a la Ruta Nacional 40, lindero al viejo hotel del organismo, a unos 35 kilómetros al sur de Bariloche. Se trata del inicio de esta instalación de la lof mapuche el 10 de noviembre de 2017; la ratificación de permanencia en el desalojo del 23 de ese mismo mes cuando se detuvieron cinco mujeres; y los hechos de dos días más tarde cuando en un recorrido de la fuerza federal (en el que fue muerto Rafael Nahuel) se identifica a otras tres personas en el predio que se sumaron a la causa, aunque Cristian Colhuan no forma parte del juicio porque permanece prófugo.
Me imputó un delito, dijo que la sentencia ya está escrita (…) la próxima voy a tomar medidas disciplinarias porque es grave”.
dijo el juez Hugo Greca al abogado defensor Gustavo Franquet.
El retiro de la acusación contra la machi Betiana Colhuan
Betiana Colhuan Nahuel, al momento del hecho que se investiga en esta causa judicial, tenía 16 años y esa fue la premisa fundamental para apartarla del caso. La defensora federal de menores, Roxana Fariña, fundamentó el cumplimiento del plazo de prescripción de la causa, que caducaba el 19 de octubre de 2023, al tratarse de una menor y regirse bajo un sistema distinto por los tratados internacionales de los derechos de los niños, niñas y adolescentes. Ese tiempo es distinto para los adultos.
El fiscal Rafael Vehils Ruiz no coincidió con la oportunidad de este planteo de prescripción, pero le dio la razón a la defensa en que se trataba de una menor de 16 años que “se encontraba junto a su madre” en el predio de Villa Mascardi el 23 de noviembre de 2017 cuando se realizó el primer operativo de desalojo, y además de primar las normas internacionales vinculadas a la infancia valoró la perspectiva de género. Por eso se preguntó: “¿Cuál es el hecho doloso que se le enrostra a una niña de 16 años que estaba con su familia?”. Así decidió retirar la acusación y pedir el sobreseimiento.
El abogado querellante, en representación de parques, Nicolás Vinuesa, objetó la solicitud pero el juez finalmente dictó el sobreseimiento porque la fiscalía retiró la acusación.
Los defensores de la Gremial de Abogados, que representan a los imputados de la lof mapuche, pidieron sumar a Betiana Colhuan como testigo, algo que el juez prometió resolver hoy, en la segunda audiencia del juicio.
El primer día se escucharon testigos de la fiscalía y la querella, en representación de Parques Nacionales. Larga jornada de casi 9 horas de debate terminó pasadas las 18.
El día del desalojo en noviembre de 2017
En la primera audiencia, el debate continuó con dos testigos civiles que fueron convocados por la Policía Federal el 23 de noviembre de 2017 en el operativo de desalojo en el que se detuvieron a mujeres mapuches que se encontraban en el lugar con sus hijos. También prestaron declaración policías de la fuerza federal y grupo GEOF que relataron su actuación.
Los testigos civiles del desalojo no estuvieron en la primera avanzada de los uniformados en el predio sino de manera posterior y acompañados por agentes de la Policía Federal.
Cinco uniformados, entre ellos el jefe del operativo, Arnaldo Daniel Neira, señalaron que no pudieron detener a varones ese día porque se dieron a la fuga. Indicaron que se encontraron con “asentamientos” o “campamentos” donde evidentemente vivían personas, se secuestraron elementos y detuvieron a las mujeres que se encontraban en el predio.
Todos los uniformados mencionaron la “resistencia bastante violenta” o “importante” de las personas que estaban en el predio. “Nos atacaron a piedrazos y todo elemento contundente”, afirmó Neira que al igual que otros testigos indicó que hubo uniformados lesionados.
La presencia de niños fue un tema central para los abogados defensores Eduardo Soares, Gustavo Franquet, Laura Taffetani, Luis Virgilio Sánchez (por zoom) y Álvaro Arias Camacho, que ante cada testigo insistieron en su situación y la ausencia de funcionarios a cargo ante la existencia de menores en el lugar.
También la defensa, con sus preguntas a los testigos, reforzó la teoría de que los predios de Parques Nacionales no estaban identificados ni tenían cercos, sino que se trataba de un espacio abierto donde había solo una bandera con referencia a la comunidad mapuche.
Por la querella declararon dos integrantes del parque Nahuel Huapi. El jefe de Guardaparques, Ramiro Aráoz, que relató el momento que se constató la toma de los terrenos fiscales y refirió que se trataba de una comunidad nueva; y el entonces intendente Damián Mujica quien informó que conoció de la ocupación por el aviso del cuidador del exhotel lindero y luego la constatación que realizó una guardaparque y un agente del organismo.
“Hubo muchos actos de vandalismo en la zona y se fueron haciendo las denuncias respectivas”, dijo Mujica quien afirmó que la lof Lafken Winkul Mapu nunca participó del comanejo con parques, en el que están cuatro comunidades mapuches ubicadas en Río Negro, entre ellos la lof Wiritray de Villa Mascardi que intentó dialogar con los nuevos ocupantes y fueron recibidos con agresión verbal.
Indicó que de la comunidad que hoy es enjuiciada no hay antecedentes de que hayan pertenecido a ese territorio de manera previa.
Interés político y fuerte custodia en el juicio
Con vallas instaladas en cada esquina de la manzana que ocupa el Escuadrón 34 de Gendarmería Nacional, restricciones de circulación a 200 metros a la redonda, y decenas de uniformados de la fuerza federal, el juzgado federal de Bariloche preparó el juicio oral, que poco tuvo de público.
Por cuestiones de espacio de manera previa se había anticipado la restricción presencial a la prensa, por eso se transmitió por streaming. Y los lugares para público se acotaron a 15 sillas, de las cuáles diez estaban reservadas por los imputados para sus familiares y allegados. Entre ellos estuvo Isabel Huala, madre del lonco Facundo Jones Huala y familiar directa de algunas de las acusadas.
La asistencia del presidente de la Administración de Parques Nacionales, Cristian Larsen, dio muestra del interés del gobierno nacional en la causa sobre la que el funcionario se expresó previamente en la prensa y con una alta exposición contraria a los intereses y reivindicaciones de los pueblos originarios.
Larsen asistió en el acotado espacio para “público general” y se ubicó detrás de los dos abogados representantes de parques en el juicio, Nicolás Vinuesa y Natalia Cardozo, y junto al poblador de Mascardi, Diego frutos, un crítico fuerte con la instalación de la lof mapuche en la zona.
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