Hubo ajuste y Figueroa pudo cerrar el trimestre con superávit en Neuquén
Hubo un fuerte achique sobre transferencias y obra pública. Solo las partidas de sueldos y coparticipación acompañaron la inflación.
Figueroa prometió un gobierno “austero” y una gestión ordenada. Foto: Florencia Salto.
El gobernador Rolando Figueroa consiguió cerrar el primer trimestre del 2024 con un superávit financiero de 155.551 millones de pesos, con un fuerte recorte sobre algunos gastos corrientes y sobre la inversión en obra pública. Las únicas partidas que acompañaron más de cerca a la inflación fueron la destinada al pago de sueldos y las transferencias de coparticipación a los municipios.
Según el informe que publicó esta semana el ministerio de Economía, los ingresos totales durante los primeros tres meses del año fueron 790.005 millones de pesos, versus 634.453 millones que sumaron los gastos, con el Instituto de Seguridad Social del Neuquén (ISSN) incluido.
El gobierno ya venía anticipando que tenía el presupuesto “equilibrado”, pero con la advertencia de que si no se aplica una nueva devaluación que acomode el precio de las regalías, en el segundo semestre podría aparecer un “déficit de caja”.
El desagregado del trimestre indica que los ingresos corrientes fueron 789.546 millones, con un fuerte peso de las regalías hidrocarburíferas y una pronunciada caída de los envíos nacionales. Por fuera de los envíos de coparticipación, las transferencias por programas específicos nacionales, en general, quedaron con las cifras congeladas del año anterior, pero frente a una inflación interanual superior al 250%.
Figueroa, sin embargo, hizo su propio ajuste sobre las cuentas provinciales.
Si se observa el apartado de los gastos, los corrientes fueron en el primer trimestre fueron 614.613 millones, nuevamente incluyendo el ISSN. Para el pago de salarios de los estatales, la provincia destinó en el período 342.678 millones de pesos, un 229% más que en el primer trimestre del 2023. Fue la única partida que quedó cerca del número de inflación, ya que los bienes de consumo solo se incrementaron un 135% y los servicios no personales un 76%.
El total de transferencias corrientes fue de 104.335 millones de pesos en los tres primeros meses del 2024, un incremento interanual del 241%. Se explica por la suba de la coparticipación a los municipios, ya que otro de los ítems incluidos en esta partida, el de las transferencias al sector privado, tuvo un fuerte recorte.
El incremento fue de un 79% en términos nominales, muy lejos de lo que fue la suba de precios interanual.
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Obra pública frenada
En los gastos de capital también se evidenció un achique. La inversión real directa en el primer trimestre del 2023, último de gestión de Omar Gutiérrez, había sido de 9.015 millones mientras que, un año después, la cifra apenas subió a 12.930 millones.
El gobernador frenó toda la obra pública al asumir para iniciar un proceso de renegociación de contratos con las empresas y tampoco recibió aportes del gobierno nacional para iniciar nuevas o sostener las de financiamiento compartido.
Dentro de la inversión real directa, en el rubro construcciones, que específicamente refiere a la obra pública (los otros ítems son maquinarias y equipos y bienes preexistentes) la provincia volcó en el trimestre 3.179 millones de pesos, casi 2.000 millones menos que en igual período del año pasado.
El gobierno ya logró que la Legislatura le apruebe un plan de reactivación de obras con una fuerte apuesta a las rutas que se hará con financiamiento externo.
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