Control de ausentismo: el 17% de las licencias de los estatales de Río Negro fueron desestimadas
Se cumplió la primer semana de revisión de los certificados médicos en la administración y salud pública. Rechazan firmas de especialistas para algunos diagnósticos.
El gobierno de Río Negro ya controla los certificados presentados por los estatales con pedidos de licencias médicas y hubo varios vetos. Foto: Marcelo Ochoa
Casi dos de cada diez certificados cargados por los estatales de Río Negro fueron desestimados en la primera semana de control de inasistencias médicas.
La semana pasada, la empresa contratada por el gobierno provincial empezó con la fiscalización de los pedidos de licencias por enfermedad de corto plazo. Se inició con la administración central y de Salud y, según se adelantó, este lunes se incorporó al personal policial y docente.
En principio, el mecanismo de la carga del pedido de licencia exigirá doble requerimiento formal. Por ejemplo, en el caso de Educación, se mantendrá el actual trámite de autorización por su sistema Comunicarnos y, además, se completará un formulario de la fiscalizadora (Dienst). Esta doble solicitud -explica el Gobierno- se mantendrá hasta que la firma unifique el proceso para la totalidad de los agente, considerando que -como Educación- la administración central y la Policía tienen sus propios mecanismos.
Ausentismo en Río Negro: el primer informe desestimó 2 de cada 10 certificados
Un primer informe de Dienst al gobierno provincial del resultado de la semana uno, que incluyó exclusivamente a los regímenes de las leyes 1844 y 1904, arrojó que algo más del 17% de las licencias requeridas fueron desestimadas por observaciones de los certificados presentados.
La función de Dienst se concentra en el cotejo de la documentación formal requerida y el marco del cumplimiento de las normativas de licencias, como también, un cruzamiento de las enfermedades y plazos fijados por los médicos con sus datos estandarizados.
En ese sentido, hay definiciones que se detectan de las conclusiones comunicadas a los solicitantes, las áreas de Recursos Humanos y a la Función Pública.
En qué casos se rechazaron las licencias médicas en Río negro
–Rechazos de certificados fijando licencias de estrés o razones psicológicas cuando los mismos no son firmados por psiquiatras.
-También se desestimaron solicitudes por enfermedades adultas que están diagnosticadas por pediatras.
-La fiscalización se cumple además en licencias por cuidado de familiar donde aparecen también negativas. Por caso, se niegan aquellos por enfermedades de hijos menores certificadas por médicos no pediatras, como un caso por “osteocondritis” (enfermedad articular en los niños).
-Un porcentaje fueron negadas parcialmente, pues se cuestiona el número de días otorgados. Por caso, una licencia por lumbalgia (dolor en la región lumbar) con 30 días de reposo y la empresa explicó que esa situación tiene un tratamiento máximo de tres días, salvo una complicación no especificada ni acompañada por sus estudios.
-Otro veto planteado se corresponde con un detalle médico de “hipertensión” y el otorgamiento de una semana de licencia. La fiscalizadora aludió que un caso de alta presión requiere una rápida resolución.
-Una certificación de una semana por infección urinaria fue también desestimada con el argumento que el paciente, con medicamentos adecuados, se recupera con 48 horas.
-En sus respuestas, la firma insistió en la falta de documentación complementaria en el pedido de plazos mayores. Una neumonía de 10 días fue desestimada por falta de la correspondiente radiografía.
La fiscalización de todos, en manos de la Función Pública
La secretaría de la Función Pública comanda la fiscalización de las licencias, que sumó ayer a la Policía y a Educación, originando pedidos de aclaraciones y reclamos por su implementación.
Esta cartera, a cargo de Tania Lastra, incorporó mayor supervisión de las políticas de Personal, según la última reforma del organigrama ministerial, aprobada la semana pasada por la Legislatura.
Puntualmente, entre las facultades de Hacienda, un inciso indica que “todas las áreas de Recursos Humanos dependerán técnica y funcionalmente” de la Función Pública, con su intervención en “todos los trámites vinculados con la definición y modificación de las estructuras organizativas, el ingreso, desarrollo, carrera, deberes y derechos del personal”, estructura de salarios, como también, en “materia de medicina laboral y control de ausentismo”.
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