Comunidades mapuches dicen que hubo «presión política» en el despido de Odarda

«Fue una presión política«. De esta forma, Sandra Serman, integrante de la comunidad Buenuleo, se refirió a la renuncia de Magdalena Odarda a la presidencia del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI).

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En un escrito de 10 páginas presentado ante el ministro de Justicia, Martín Soria, Odarda argumentó cuestiones de salud que, según manifestó, se ha visto deteriorada por no haberse tomado ni un día de vacaciones en varios años. Sin embargo, el pedido de renuncia correspondió al presidente Alberto Fernández a partir de varios cuestionamientos por parte de los gobernadores, entre los que se encuentran Arabela Carreras y Omar Gutiérrez.

«Nuestra amiga Magdalena hizo presión donde nadie ha querido tocar y ahora tenemos las consecuencias. De hecho, nos sorprendió que esto no haya sido antes. No solo pensando en la comunidad Buenuleo sino en general», dijo Serman.

Integrantes de esa comunidad habían sido denunciados por usurpación en una causa que aún hoy sigue vigente. En septiembre del 2020, Odarda firmó la resolución por la cual reconoce “la ocupación actual, tradicional y pública de la Comunidad Lof Che Buenuleo sobre 481 hectáreas en la zona del cerro Ventana», en Bariloche.

Esa decisión generó una fuerte polémica porque se publicó en el Boletín Oficial un día después de que el Tribunal de Impugnación Provincial confirmara el desalojo de los acusados.

«Odarda hizo cuanta carpeta técnica y relevamiento pudo. En Río Negro hubo una discusión política por la ley 26.160 -de relevamientos territoriales- porque el gobierno provincial no quiere aflojar y no lo quiere hacer«, manifestó Serman. Esa norma nacional declara la emergencia «en materia de posesión y propiedad de las tierras que tradicionalmente ocupan las comunidades indígenas originarias del país con personería jurídica inscripta en el Registro Nacional de Comunidades Indígenas, en el organismo provincial competente o las preexistentes».

Serman consideró que los gobernadores fueron los responsables por la salida de Odarda: «Además, no debemos olvidar que Magdalena se paró para poder solucionar el tema de Lago Escondido. Un palo quemado que nadie quiere agarrar. Por eso, no tenemos dudas que hay una presión política y estamos en contra», manifestó Serman.

Odarda y Lewis

Blanca Gallardo, de la comunidad mapuche Gallardo Calfú, de El Foyel, también lamentó la salida de Odarda. «Nos han dicho que Odarda salió por cuestiones de salud. No se si eso será cierto porque a veces, se buscan excusas», señaló la mujer.

Tras la salida de Odarda, la presidencia del Inai será asumida por Analía Noriega, fundadora de la fundación Napalpi, que, hasta ahora, coordinaba el programa de Relevamiento Territorial Ley 26160 del organismo nacional.

«Esperamos que la nueva presidenta actúe de la misma manera que Odarda. Que vaya al frente por nosotros. El INAI es nuestro. Odarda tuvo enfrentamiento con Lewis. Como mapuches, sabemos que la Constitución Nacional dice que la frontera precordillerana no es vendible. Nosotros íbamos a pescar a Lago Escondido», señaló Gallardo.