Comedores y merenderos de Bariloche recibieron una donación de ollas, pero piden insumos
La agrupación Pueblo Unido entregó las donaciones en el Centro Cívico, pero a la vez hubo pedidos de ayuda al municipio de Bariloche.
Los referentes de 16 comedores y merenderos recibieron una donación de ollas en el Centro Cívico. Foto: Chino Leiva
La falta de trabajo y la crisis que generó la pandemia convocó a un grupo de voluntarios a brindar ayuda para ofrecer un plato de comida en el barrio Malvinas. En un primer momento, unas 15 familias concurrían al comedor «Soñando juntos», pero el número fue aumentando rápidamente hasta llegar a más 30 familias que asistían al barrio Malvinas desde distintos puntos de la ciudad.
«Nos preguntaban por Facebook a dónde estábamos», relató Mirta Paredes, coordinadora del comedor en el barrio Malvinas. Ante la incesante demanda, la agrupación se extendió a 12 barrios de Bariloche -Nahuel Hue, Omega, Vivero, INTA, El Frutillar, Mutisias, San Francisco IV, San Cayetanito, Virgen Misionera y Rancho Grande- que ya forman parte de la agrupación nacional Pueblo Unido. También lo integran voluntarios que llevan viandas al basural todas las semanas.
El desafío fue aún mayor. Ya no funcionan solo como comedor o merendero, sino que brindan ayuda escolar, talleres de maquillaje infantil y manualidades. «Hacemos lo que podemos con los recursos que contamos«, explicaron.
Esta mañana, los referentes de 16 comedores y merenderos se concentraron en la plaza del Centro Cívico para recibir una donación de ollas y cacerolas por parte de Pueblo Unido. También presentaron una nota en el Municipio de Bariloche pidiendo una reunión con el intendente Gustavo Gennuso a fin de solicitar insumos.
La demanda creció tanto en el último tiempo que, muchas veces, los voluntarios se encontraron con que no podían cocinar por la falta de disponibilidad de ollas. Usaban las cacerolas de sus propias casas que no servían para preparar comida en cantidad. Y ante la falta de recursos, se iban prestando las ollas para garantizar las viandas en los diversos barrios.
«Ahora tenemos las ollas pero necesitamos mercadería. Hoy, sin ayuda, entre los mismos compañeros tratamos de juntar recursos para comprar los insumos porque no recibimos ayuda de ningún estamento del estado«, planteó Marisa Cárdenas, del merendero Luz de Esperanza del barrio El Frutillar.
Cada vez más demanda
«Notábamos más y más gente que se iba sumando. Las familias padecen cada vez más la falta de trabajo. Tratamos de lidiar con eso en la agrupación aunque nosotros somos personas de recursos escasos. Lo hacemos de corazón», acotó Paredes.
Dijo que el municipio solo aporta «algo de mercadería» que retiran del gimnasio municipal 2 aunque les dura «solo una semana». ¿Cómo se sustentan entonces? Paredes reconoció que cuentan con «amigos verduleros» que hacen donaciones y que por lo general, «los aportes para comprar comida salen de sus bolsillos».
«Todo lo que es fideos y alimentos secos nos mandan desde la agrupación Pueblo Unido. Cuando podemos, hacemos rifas. Como la gente ya nos conoce, nos colaboran», manifestó.
Tras la entrega de las ollas a las 16 instituciones de Bariloche, Cristóbal Marcioni, coordinador nacional de Pueblo Unido, encabezó la entrega de la nota al intendente de Bariloche. «No se recibe ninguna ayuda del municipio. Nación entrega alimentos y secos y esta donación se ollas se hizo con un aporte de 150.000 pesos. Por eso, decidimos hacer esta donación de manera no tan silenciosa y pedir una audiencia con el intendente. Hay mucha gente realizando esta tarea de manera solidaria«, indicó.
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