Análisis: Gloria Ruiz, los parientes y los recursos de la Legislatura
Si se ciñera estrictamente al presupuesto de este año, la vicegobernadora Gloria Ruiz (que por ahora está suspendida con pronóstico de destitución) podría usar en 2025 poco más de 300 millones de pesos en asistencia social y obras públicas en ciudades del interior de Neuquén. Antes del recorte que partió aguas en la relación con el gobernador, esa asignación era de 6.500 millones, el 11% del total de gastos previstos en el Poder Legislativo.
En 10 años la Cámara de Diputados de la provincia redujo en términos reales el gasto en su principal función, que es la “formación y sanción de las leyes”, e incrementó los fondos para los funcionarios y la cuestión administrativa.
Qué hace una vicegobernadora
No hay ni en la Constitución de Neuquén ni en las leyes en vigencia ninguna función reservada al vicegobernador o vicegobernadora que no sea la de reemplazar al gobernador en caso de ausencia y la de presidir la Legislatura.
Gloria Ruiz reclamó para sí fondos extraordinarios y defiende una facultad sin justificación para distribuir dineros entre familias necesitadas, asistir a los municipios y financiar obra pública.
Así como justifica estas funciones, defiende la designación de parientes en la cámara. Después de todo -razona- no es ella la primera en hacerlo. Y abunda: sus antecesores, entre los que están el actual gobernador y súbito archienemigo de la vice Rolando Figueroa, echaron mano a estos fondos para financiar actividades políticas más relacionadas con el perfil personal que con un proyecto colectivo.
No porque ya se haya hecho deja de estar mal. La naturalización cesa cuando se advierte y se corrige.
Un buen punto de partida sería que se reformulara el presupuesto de la Legislatura, se recortaran gastos ajenos a la función y se dieran señales de austeridad. Claro que hay que ver quién está dispuesto a hacerlo.
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