Quién es «Shakira», la mujer que lideraba una banda narco en Roca: empleada municipal y delegada de ATE

El operativo se realizó en el barrio Tiro Federal y toda la familia quedó imputada por vender droga.

La mujer fue demorada ayer.

La Justicia Federal avanza con la investigación de la banda narco que fue desbaratada anoche en la zona norte de Roca. La mujer que lideraba la banda, apodada «La Shakira», es una empleada municipal que junto a toda su familia vendía estupefacientes en el barrio Tiro Federal.

Fuentes cercanas a la investigación señalaron que la narco, identificada como Claudia Padilla, trabaja en el área de Servicios Públicos de la municipalidad. Además detallaron que es delegada del sindicato de ATE. Sin embargo los investigadores indicaron que la venta de droga no estaba relacionada ni con su trabajo municipal o el gremio, sino que solo vendía en su búnker ubicado en el barrio Tiro Federal.

La líder de la banda era investigada desde el año pasado por la Delegación de Toxicomanía en Roca sin embargo cada vez que iban a allanar el búnker que estaba asegurado con rejas, los delincuentes alcanzaban a descartar la mercancía.

En esta ocasión Toxicomanía realizó allanamientos simultáneos en el búnker, en la casa de Shakira y de sus familiares. Fue así como lograron secuestrar la droga y con estas pruebas fueron imputados por la Justicia Federal. Las casas estaban lindantes al bunker y conectadas entre sí.

En total se secuestraron más de 100 envoltorios de cocaína fraccionados y listos para su comercialización, “cogollos” de marihuana, dinero en efectivo y nueve teléfonos celulares.

Mujer de Roca lideraba una banda narco: quiénes la integraban y dónde operaban


La banda narco conformada por una familia que residía en la zona norte de la ciudad estaba integrada por la empleada municipal, su pareja y sus dos hijos, estos eran los encargados del «aprovisionamiento del búnker y la recaudación del dinero». También formaban parte la madre de la mujer y su hermano, quiénes cumplían el rol de «centinelas» y alertaban la presencia de policías. En el último eslabón de la banda se encontraba los «dilers», estos realizaban turnos por días.

A raíz de la investigación quedó imputada la empleada municipal de 43 años que lideraba la banda, su madre de 64 años, sus hermanos de 23 y 27 años, su esposo de 32, sus hijos de 20 y 25 años y su nuera de 20.

Fuentes cercanas al caso indicaron que fueron demorados y no quedaron detenidos. Los 8 fueron imputados por la Justicia Federal por violar la ley de estupefacientes.


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