La historia del cumpleaños que casi terminó en un baño de sangre en Bariloche
El autor de la balacera que dejó cuatro heridos fue imputado por el intento de homicidio agravado por el uso de un arma de fuego. El juez dispuso que cumpla la prisión preventiva de manera domiciliaria en otra ciudad.
El hecho que se investiga ocurrió la noche del 2 de septiembre pasado en el barrio Arrayanes. (FOTO DE ARCHIVO)
“!Salgan hijos de puta!”, gritó Luis Antonio Pérez desde la calle. Las personas que estaban en el interior de la vivienda festejaban esa noche del 2 de septiembre pasado el cumpleaños de una nena de 10 años y casi no escucharon la amenaza. Pero las detonaciones de un arma de fuego sobresaltaron a todos. Minutos después, se desencadenó el drama. En la casa había chicos de varias edades, mujeres y varones.
Un joven abrió la puerta de la casa con la intención de ir en busca del agresor. Apenas asomó, recibió un proyectil que perforó su omoplato derecho. Otros dos invitados salieron a la calle para detener al tirador, pero también fueron heridos. Hasta que un muchacho logró aproximarse a Pérez, que le efectuó un tiro antes de que se abalanzara sobre él.
La bala entró por el hemitórax izquierdo y aunque quedó herido golpeó a Pérez para evitar que continuara con los disparos. Después, salieron varias personas de la casa y le dieron una brutal golpiza al autor de la balacera, que estaba con otra persona, que huyó con el arma de fuego. El dramático episodio sucedió en un sector del barrio Arrayanes de Bariloche. Y aunque nadie lo dijo, se percibe que el conflicto viene desde hace tiempo.
Cuatro invitados terminaron esa madrugada del 3 de septiembre último en la guardia del hospital Ramón Carrillo. También, el autor de los disparos, según la acusación del fiscal del caso Marcos Sosa Lukman.
El fiscal relató el hecho según su teoría y lo imputó a Pérez como autor de un intento de homicidio agravado por el uso de arma de fuego.
Indicó que el joven que pudo neutralizar al tirador estuvo en riesgo de vida porque perdió casi un litro de sangre. “(Pérez) no lo mató porque no tuvo puntería y le pegó en el hemitórax izquierdo. Le pudo haber pegado en el corazón”, advirtió el fiscal en la audiencia de formulación de cargos, que se hizo este lunes en el edificio de Tribunales de la calle John O´Connor al 20 de esta ciudad. Además, pidió la prisión preventiva para el acusado.
Indicó que uno de los lesionados recibió un tiro en el omóplato, otro en el muslo derecho, un tercer joven sufrió una herida en un pie y el caso más grave fue el del muchacho que logró impedir que Pérez continuara disparando y que sigue internado. Dijo que una mujer que estaba en el cumpleaños avisó al 911.
Cuando policías de la comisaría 28 llegaron al lugar, algunos heridos habían sido trasladados en el auto de un vecino hasta el hospital.
Las pruebas de la fiscalía
El fiscal sostuvo la acusación con el acta de procedimiento policial y declaraciones de testigos. También, con los testimonios de las víctimas que identificaron al autor de los disparos porque es vecino del barrio. Advirtió que los policías hallaron en la calle seis vainas servidas y dos cartuchos completos. Señaló que ningún vecino quiso ser testigo en el procedimiento policial por el temor que había provocado el ataque a balazos.
Mencionó que se hizo un allanamiento en el domicilio del sospechoso, pero no encontraron el arma. Dijo que los policías habían hallado un cartucho y una vaina servida.
El defensor particular Horacio Brucellaria, que asistió al acusado planteó que tiene otra teoría opuesta a la de la fiscalía para explicar el hecho. Afirmó que Pérez es la víctima. Y cuestionó que se tratara de un intento de homicidio agravado por el uso de un arma, como planteaba la fiscalía. Sostuvo que fue una riña que dejó personas lesionadas. Afirmó que la vida del imputado estuvo en riesgo.
De hecho, Pérez estuvo internado desde el 3 de septiembre hasta este lunes a la mañana, cuando recibió el alta médica y lo trasladaron hasta Tribunales para la audiencia de formulación de cargos. El hombre presentaba varias lesiones.
El fiscal replicó al defensor. Recordó que testigos declararon que el acusado se dirigió a la vivienda donde cometió el ataque y que portaba el arma de fuego.
Tras escuchar al fiscal y al defensor el juez de garantías admitió los cargos formulados por Sosa Lukman contra el imputado y autorizó que se investigue el caso por un plazo de 4 meses.
Prisión preventiva domiciliaria
El fiscal pidió la prisión preventiva para Pérez porque alertó que existían riesgos procesales de entorpecimiento de la investigación si permanecía en libertad. Recordó que hay una persona que falta identificar que fue la que se llevó el arma.
El defensor pidió al juez que la prisión preventiva la cumpla de manera domiciliaria por la crisis carcelaría que vive el penal 3 de Bariloche con superpoblación de personas detenidas. Y propuso que la cumple en otra ciudad porque es vecino de los heridos. El fiscal estuvo de acuerdo, pero pidió que sea controlado con tobillera electrónica.
Gangarrosa aceptó la propuesta y dispuso que la prisión preventiva sea por 4 meses en el domicilio indicado por la defensa en otra ciudad.
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