Intendente y legislador implicados en caso de corrupción de menores

Seis sospechosos figuran en la causa de presunta corrupción de menores de San Antonio, según el relato de una menor de edad en la Fiscalía de Viedma. Esta acusación penal alcanza al legislador Javier Iud y, también, involucraría al intendente Luis Ojeda.

La fiscal Paula Frandsen encabeza esa investigación, originada hace dos semanas atrás en la presentación de una operadora social por sucesos ocurridos en San Antonio en 2016 y 2017, contra una menor, hoy de 17 años.

La víctima, entonces de 15 años, contó de encuentros sexuales con mayores. La causa fue confirmada por el Ministerio Público, abierta por la denuncia de una agente del Estado en referencia a “delitos contra la integridad sexual” de una menor, no institucionalizada en ese momento, y que, con la investigación, derivó en un “presunta corrupción de menores”, con “varios sospechados”.

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Más allá de esa generalidad oficial, la joven -hoy institucionalizada- señaló a media docena de personas, entre ellas, el exintendente de San Antonio, Javier Iud.

Anoche trascendió que la menor también habría señalado al jefe sanantoniense, Luis Ojeda.

Por su parte, el hoy legislador ayer negó toda la acusación, contó que concurrió de forma espontánea a la Fiscalía y afirmó no haber visto en su vida a la menor. Consciente de la acusación, Iud habló con “Río Negro” y, también, escribió en Facebook: “Jamás consumí alcohol, drogas, ni he participado de fiestas inmorales, y por eso estoy muy tranquilo”. Dijo que no se esconderá y contribuirá para que “se pueda esclarecer de donde viene esto”, admitiendo el costo político actual , aunque “la verdad deberá llegar después”.

Bala en el parabrisas

La versión sobre la causa ya circulaba pero, ayer a la mañana, algo que aportó a su difusión. La subsecretaria de Derechos Humanos de Viedma, Gladis Cofré confirmó la aparición de una bala -dentro de un envoltorio- en el parabrisas de su vehículo. La amenaza fue relativizada por la funcionaria. “No me da miedo, sí bronca y es de muy cobarde”, declaró a Radio Nacional , pero desestimó formalizar denuncia. Y contó sobre actuaciones que podrían relacionarse con el hecho. Recordó acompañamientos a varias denuncias , entre ellas, la recientemente formalizada por “casos de corrupción de menores en San Antonio”. Contó una reunión el lunes con la fiscal Frandsen para expresar su “preocupación” por este nuevo caso, en el cual acompaña a una “testigo importante” en la denuncia. Cofré ya tuvo activa participación en los casos de corrupción de menores anteriores en Viedma, con nueve condenados y detenidos, entre ellos, el ex juez Juan Bernardi.

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“Nunca participé de fiesta desenfrenada, no consumí drogas, ni alcohol. No tuve vicios legales. Esto está relacionado con cuestiones políticas y con el odio”.

Javier Iud, legislador provincial

“Soy decente, no tengo cosas de las que me pueda arrepentir”

Iud permaneció ayer en su despacho del bloque. Evidentemente, afectado y consciente del complejo momento, el legislador -que el lunes cumplió 47 años- se aferró a que está “muy tranquilo de mis actos. Soy decente. No tengo cosas de las que me pueda arrepentir, en todo caso, será de mi vida personal”. “Nunca participé de ninguna fiesta desenfrenada, no consumí drogas, ni alcohol. No tuve vicios legales. Esto está relacionado con cuestiones políticas y con el odio, el deseo del mal. Me tuvieron que tirar un balde de mierda”, dijo a “Río Negro”.

P- ¿Ud. fue a la Justicia?

R- Hace unos días, recibí un Whatsapp con la versión de una denuncia por corrupción de menores y sindicaba a un legislador y ex intendente de San Antonio. Éramos dos. Me presenté en Fiscalía para ponerme a disposición. Ayer fui con un escrito, patrocinio personal y constituí domicilio.

P- ¿Estuvo en alguna reunión que permita esa versión?

R- Hace mucho tiempo que he dejado de participar en actividad social en mi localidad. Ni deseable ni indeseable. No salgo, espero la noche para estar con mi familia y mirar TV.

P-¿ Y algunos años atrás?

R- Tampoco. En mi vida participé de ninguna fiesta indecorosa. Puede ser ingenuo pero nunca vi a nadie drogándose, con una línea de cocaína. Estoy sumamente tranquilo. Estuve en silencio, pensé que la supuesta víctima se podría arrepentir y reconociese que alguien la indujo.

P- ¿Conoce a la víctima?

R- No. Nunca la vi en mi vida. Tengo hijos de 18 y 21 años, y nunca me he relacionado con jóvenes, salvo que sean amigos de ellos.

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