Plaza dijo que se cansó del “autoritarismo”

La concejal Laura Plaza justificó su partida del bloque del Movimiento Popular Neuquino en la falta de libertad para votar acorde a sus “convicciones”. “Me harté de ser una marioneta”, dijo la ahora edil de Convicción Cívica, quien anticipó que no renunciará a su banca y seguirá participando en política cuando finalice su mandato.

“No es una decisión que tomé de un día para el otro, en todo caso es el desenlace de un proceso de malestar que viene hace meses. Me cansé del autoritarismo, de obedecer y votar cosas que no tenían absolutamente nada que ver con mis principios”, aseguró. En conferencia de prensa, contó ayer que le comunicó su intención de abandonar el bloque a Gerardo Gutiérrez, hermano del gobernador, el viernes a la mañana. “A partir de ahí sufrí una tortura”, manifestó Plaza, porque afirmó que recibió amenazas de empresarios, dirigentes de sindicatos y operadores políticos del entorno del gobernador Omar Gutiérrez.

“Un integrante del bloque llegó a decirme que todos los que salieron a cuestionarme en la campaña, iban a ser doblemente malos, que me iba a terminar yendo de la provincia, que nunca más iba a trabajar en un medio, que me iban a ser mierda”, relató.

Plaza aseguró que su alejamiento no tuvo que ver con la elección del síndico, sino que esa votación fue “la gota que rebalsó el vaso”. Sobre las amenazas que indicó haber recibido, desestimó hacer una denuncia judicial. “Creemos que no va a pasar a mayores. Pienso que trataron de seducirme, primero, y después sembrar miedo. Si te van a hacer algo, no te avisan”, consideró.