Pastores evangélicos confirman que se reunieron en cuarentena convocados por el municipio

Las 38 personas que se reunieron en la iglesia Metodista Pentecostal, de la calle Vilcapugio para participar de un encuentro convocado por la municipalidad de Bariloche con dos funcionarios  el 9 de mayo pasado, permanecen aisladas luego de que dos asistentes a ese encuentro fueron confirmados con coronavirus.

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La alarma surgió a partir de la detección de dos casos positivos. En el interrogatorio epidemiológico surgió que habían participado de un encuentro con decenas de personas. De inmediato, el personal del hospital Ramón Carrillo los contactó uno a uno y procedió a su aislamiento.  

“De la reunión en la iglesia de la calle Vilcapugio participaron técnicos, sonidistas y algunos pastores con sus esposas. Éramos 38 personas y decidimos juntarnos ahí porque era la iglesia más grande de la ciudad. La idea era que fueran todos los que podían”, relató el pastor Hugo Spitzmaul.

La reunión fue convocada por las autoridades municipales a partir de un pedido de las iglesias evangelistas para retomar encuentros virtuales con los feligreses. Requerían de un permiso especial para circular destinado a pastores, técnicos y músicos a fin de realizar las transmisiones en vivo desde las iglesias.  

Spitzmaul recalcó que del encuentro participó el jefe de Gabinete, Marcos Barberis, y la secretaria de Protección Civil, Patricia Díaz.

“Estábamos sentaditos a una distancia preventiva -aunque después, el hospital nos dijo que no eran dos metros-, con barbijos. Y yo estaba en la puerta poniéndole alcohol a todos. Nunca pensamos que estábamos haciendo algo malo porque la convocatoria fue iniciativa del intendente”, señaló.

El pastor insistió que desde el municipio, “nos dijeron que vayamos los más que podamos porque en la primera reunión éramos ocho personas”. La videollamada con los funcionarios municipales estaba prevista para las 10 de la mañana.

“¿Puede ser que no hayan entendido que la modalidad era virtual y no presencial?”, preguntó este diario.

“No, –destacó Spitzmaul- no hay manera de equivocarse. De hecho, en el encuentro dijeron qué bueno que son bastantes para la capacitación”.

El encuentro se extendió por unos 20 minutos.

Fuentes del municipio, recalcaron que el encuentro previsto era virtual. “Cuando vieron que eran muchos pero en un ambiente grande con barbijos y separados les dijeron, al término del encuentro, que se fueran cada uno por su lado”, contaron.

Spitzmaul relató que tras el contagio de un pastor y su esposa, desde el hospital les pidieron la lista de todos los asistentes a la reunión.

“A nosotros nunca nos autorizaron a tener reuniones en las iglesias. El 15 de marzo fue la última vez que todas las iglesias tuvieron su reunión. Lo que el intendente nos autorizó es a alabar o cantar, algo muy marcado en nuestras congregaciones”, indicó el pastor y añadió: “Las iglesias son semilleros de músicos. Y la ausencia estaba afectando a la gente, especialmente a los mayores.  Por eso se dio la autorización a los pastores, músicos y técnicos”.