Incendios y estupidez humana

Valientes mujeres y hombres enfundados en trajes de bomberos voluntarios y trasladados en un limitado parque vehicular, se están jugando su vida batallando en desigualdad de condiciones contra los incendios forestales y de campo que cíclica pero cada vez más ferozmente, afectan a distintas regiones de la geografía nacional y sudamericana (hoy mismo Córdoba, Bolivia, Brasil, etc.)

En efecto, admirables y heroicos bomberos, combaten sin concesiones múltiples y diversos focos activos de incendios simultáneos aquí y allá, allá y aquí.

A propósito, los pronósticos meteorológicos inmediatos no son nada auspiciosos por estas horas. Además, Argentina se encuentra invadida y cubierta por humo y cenizas de incendios en países limítrofes.

Sólo en Córdoba y Entre Ríos, durante ya casi dos semanas, nuestros gigantes bomberos de espíritu, vienen trabajando a destajo y sin pausa, para sofocar incendios (espontáneos, provocados por un vidrio/cristal o una lata expuestos permanentemente al sol y culposos): Muchos están en categoría de fenómenos intratables que, como señalamos afectan distintas regiones provinciales. Muchas veces por estupideces personales, en tanto otras, por descontroles, imprevisiones y corrupciones gubernamentales traducibles en desatinadas e impropias autorizaciones para desarrollos inmobiliarios, turísticos, etc.

Ojalá empecemos a darnos cuenta y recompensar generosamente a todas esas personas, bomberos voluntarios, que se vienen jugando su propia vida en cada “gesta ígnea” batallando en desigualdad de condiciones -muchas veces sin equipamientos, pertrechos, logística apropiada ni recursos suficientes-, para enfrentar con hidalguía sin par

Ellos, al fin y al cabo, son quienes están logrando en la medida de lo imposible, salvar vidas, fauna, biodiversidad, recursos naturales ( flora, biomas, biósfera, fauna) y hasta propiedades o bienes ajenos.

Resulta realmente impresionante tan vivo, conmovedor y admirable testimonio de cada uno de estos hombres y mujeres que dejan sus familias e intereses para combatir las llamas dónde y hasta que sea necesario!

¿Cuántos bomberos en algún cumpleaños, festejo o adversidad familiar, nochebuena o año nuevo, en lugar de pasarla con sus familias y amigos -en ocasiones enfermos-, tienen que estar en la línea de combate al fuego, trazando creativos contrafuegos, para conservarnos a salvo de otro incendio, de su propagación y de sus terribles consecuencias?

Su servicio ya debería de ser reconocido, su sacrificio no puede ser ignorado. Obviamente, necesitan y merecen alto trato y meritoria compensación regular. La provincia, la nación, los municipios, cooperativamente, deben proporcionarles, ¡ahora!

Lo cierto es que todos estamos admirados, conmovidos, asombrados y orgullosos de nuestros bomberos voluntarios cordobeses, pero con eso, con discursos, cartelería, medallas, diplomas y aplausos; ¡no alcanza!

Es un despropósito que sea imposible contrastar el accionar inapreciable de nuestros bomberos voluntarios con los escándalos e inutilidad incesante de una privilegiada e inútil dirigencia política, por ahora, las cosas aún son ¡cómo no deberían ser!

Por último, toda conciencia de ciudadanía como virtud cívica debe motivar nuestras responsabilidades y deberes tanto personales, como profesionales y comunitarios. Esta, y no otra, es la mejor garantía de la consagración de los derechos, como emanación natural del entrecruzamiento de los deberes mancomunados de todos.

Ese es el horizonte de una civilización cooperativa de sujetos éticos para la cual, en este caso, el cabal reconocimiento y generoso equipamientos y remuneración de nuestros bomberos, no debe esperar. Naturalmente, sin perjuicio de transformar, modernizar mediante impagenes satelitales, drones, reaprovechamiento de la energía solar y eólica, estratégicos cuerpos de vigilancia y prevención ígneael servicio. Y empoderar con premura, eficientes gestiones de programas oficiales sostenibles para la prevención, extinción y eficaz manejo integral del fuego, en términos permanentes e inmediatos.

Experto en cooperativismo.