Exclusivo Suscriptores

Hospitales a oscuras en Gaza

Los pocos hospitales que aún funcionan han tenido incluso que cerrar algunos servicios debido a la falta de carburantes en Gaza.

Redacción

Por Sarah Benhaida/AFP

En la penumbra de los pasillos del hospital Kamal Adwan, en el norte de la Franja de Gaza, solo se ve la luz de las linternas de los celulares de los médicos, que las usan para atender a sus pacientes debido a la escasez de combustible para alimentar los generadores.

Los pocos hospitales que aún funcionan han tenido incluso que cerrar algunos servicios debido a la falta de carburantes en Gaza, bajo asedio desde el inicio de la guerra hace más de diez meses entre Israel y el movimiento islamista Hamás, en el poder en este territorio palestino.

Las enfermeras y los médicos usan la linterna de sus teléfonos móviles para desplazarse, auscultar a los pacientes o redactar sus informes en el hospital Kamal Adwan, en Beit Lahia.

Entre órdenes de evacuación, bombardeos israelíes y combates, Ayman Zaqout pasó un infierno hasta llegar a este centro, donde fue ingresado por cólicos nefríticos.

Gimiendo por el dolor, se dio cuenta de que sería tratado en la oscuridad. “No hay electricidad y no sé cómo van a poder tratarme en estas circunstancias”, contó. Poco después de su arribo, el hospital “dejó de admitir pacientes”, explicó uno de sus médicos, Mahmud Abu Amsha, que señaló que “organizaciones internacionales ya no le suministran el combustible necesario para los generadores”.

Al inicio de la guerra, la única central eléctrica del enclave quedó fuera de servicio e Israel cortó el suministro de energía.

Desde entonces, las cisternas de gasolina entran a cuenta gotas, como el resto de la ayuda humanitaria que transita por los puestos fronterizos de Gaza, controlados por Israel.

En caso de una emergencia importante -como un bombardeo o una llegada masiva y repentina de heridos- los médicos del Kamal Adwan recurren a la energía solar. “Pero no puede utilizarse con los pacientes que necesitan un equipo eléctrico las 24 horas del día”, explica Abu Amsha.

Los bebés prematuros en las incubadoras “están amenazados de paro cardíaco y muerte”, advirtió. También hay “siete pacientes” en cuidados intensivos con respiradores y “morirán debido a la falta de carburante”, apuntó.

Los 2,4 millones de gazatíes, un 90% de los cuales han sido desplazados al menos una vez desde el inicio de la guerra, solo cuentan con 16 hospitales en funcionamiento parcial, según la ONU. El hospital Al Awda, en el norte de la Franja, espera desesperadamente la entrega de carburante para encender los generadores, declaró el director interino, Mohamed Salha. “Hace dos días, cerramos algunos servicios y aplazamos operaciones. Esto pone en peligro a los enfermos y heridos”, advirtió.


Temas

opinión
Adherido a los criterios de
Journalism Trust Initiative
Nuestras directrices editoriales
<span>Adherido a los criterios de <br><strong>Journalism Trust Initiative</strong></span>

Comentarios

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscribite desde $599 ¿Ya estás suscripto? Ingresá ahora