Ensayo de paz social anticipada en Neuquén
Obra pública y paz social, dos armas para que empuñe Rolando Figueroa en la campaña de las legislativas pero que necesitarán un armado para contener a todos.
El gobierno de Rolando Figueroa retomará este lunes la paritaria anticipada con la que buscará sellar un acuerdo salarial con los gremios estatales de Neuquén por todo el 2025. La primera oferta, que no quedó plasmada en actas pero adelantó las intenciones del Poder Ejecutivo, incluyó mantener las actualizaciones atadas al Índice de Precios al Consumidor (IPC) y pagar un bono navideño de unos 180.000 pesos.
No convenció del todo pero ya despeja un tema de la mesa que es el de los ajustes por inflación. Cuando empezó su gobierno, Figueroa había puesto en duda la continuidad de este mecanismo inaugurado por la gestión de Omar Gutiérrez, pero finalmente parece haber abrazado la previsibilidad que ofrece.
lgunos recordarán que hubo un ministro de Economía del exgobernador que sugirió fijarlo por ley. No se llegó a tanto, porque siempre es mejor guardarse el control de la negociación que cederlo a una regla escrita, pero no pareciera haber intenciones de cambiarlo.
Las actualizaciones atadas a la inflación, en un contexto de suba de precios a la baja, no parecen tan mala idea para el 2025, mucho menos con una recaudación de impuestos e ingresos por regalías que crecen por encima de ese índice.
A Figueroa le queda esta semana para lograr un acuerdo con todos los gremios y lograr su objetivo de incorporarlo en el proyecto de Presupuesto 2025. Es posible que lo consiga con ATE y UPCN, ¿podrá también con ATEN?
Ya el mecanismo de decisión que tiene el gremio docente, sin mencionar su propia interna y las dificultades que demostró la conducción de Marcelo Guagliardo de imponer sus mociones en el conflicto por el presentismo, podrían augurar un proceso de aceptación más dificultoso.
Figueroa tiene plazo hasta el jueves 31 para enviar el presupuesto. Se estima que el cálculo rondará los 6 billones de pesos y tendrá el equivalente a unos 700 millones de dólares destinados a obra pública. Es decir, el gobierno le destinará a infraestructura alrededor de un 15% del total.
Falta ver los números finos pero, a priori, será un número mayor al de los anteriores presupuestos, que dejaban entre un 8% y 10% para gastos de capital. El gobierno de Figueroa hizo del atraso en infraestructura una de las banderas de su gobierno y la población está esperando que del diagnóstico de factos se pase a los actos. O mejor que decir es hacer, en honor al 17.
Figueroa firmó esta semana su primera toma de crédito internacional, a seis meses de que la Legislatura le autorizara la ley de endeudamiento por hasta 500 millones de dólares. El préstamo que acordó con el Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF) será por 100 millones de dólares y se pagará en 10 años, con cinco de gracia, a una tasa de casi el 7%.
El gobierno inició gestiones para mejorar la calificación de su deuda pública y poder emitir nuevos títulos a menor tasa. Para eso fue la gira en Londres que realizó esta semana y, también para eso, será la que inicie por Nueva York el mes que viene.
Obra pública y paz social, dos armas para que empuñe Figueroa en la campaña de las legislativas pero que necesitarán, antes que todo, un armado político para contenerlos a todos.
Esta semana ya hubo un gesto hacia el diputado y presidente del PRO, Marcelo Bermúdez, quien se llevó un despacho a favor para su proyecto que autoriza el uso de armas menos letales en la policía. No fue gratuito, porque dividió el voto del MPN, otro aliado clave para Figueroa en la Legislatura, pero probablemente menos gravoso que desatender al partido que coquetea con formalizar una alianza en 2025 con La Libertad Avanza.
Es la boleta del león y no otra la que enfrentará el oficialismo provincial para quedarse con diputados y senadores propios.
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