Nuevos y viejos vecinos, la historia no contada de Sapere

NEUQUÉN (AN).- En el barrio Sapere salieron a liberar la memoria y muchos pibes se encontraron con viejos vecinos que se habían guardado un pedazo grande de la historia de ese también viejo asentamiento ribereño. Allí vivieron, lucharon y soñaron un puñado de pioneros que, en la década del 70, terminaron entre rejas. Y cuatro de ellos nunca más volvieron.

«Hay una historia que no se contó», dice Nelly Curiman, una histórica vecina del primer barrio neuquino, el que se ve arriba cuando se llega a esta capital por los puentes sobre el río Neuquén.

Y entre todos los vecinos, apareció la figura de Lucy Cantero, un símbolo en la lucha por la defensa de los derechos humanos en Neuquén.

Lucy tiene 82 y a pesar de algunos achaques que le trajo el invierno conserva intacta las fechas, los hechos y la esencia fundacional del barrio que se levantó entre los médanos que alguna vez donó el doctor Aníbal Sapere.

Lucy y otros viejos vecinos, más los nuevos y los jóvenes se reunirán mañana a las 15 junto al tanque de agua y el monolito en un acto que servirá para contar la historia jamás contada. Hablarán también se la masacre de Trelew.

La iniciativa fue de la agrupación Hijos de desaparecidos y la difusión se hizo casa por casa, con volantes y fotos y una invitación ¿Sabías que este barrio tiene historia de luchas?, indicaron. Sonará la música que escuchan los jóvenes de los 70, el rock de los pibes de ahora, habrá voces como la de Lucy (de esas personas que nadie puede dejar de escuchar) y pintura con evocación y contenido en el viejo tanque de agua, pieza fundacional de esta ciudad.

Lucy, precisamente, es quien contó que entre los médanos y la costa había sufridos vecinos que de un día para otro se enteraron que donde ellos vivían se proyectaba levantar un hotel casino.

Allí despertaron y se organizaron los vecinos que tras muchas luchas, varias corridas y algunas negociaciones lograron que se levantarán dos tandas de viviendas de material (ladrillo y cemento) el núcleo original del barrio Sapere. Señalados como revolucionarios hubo razias y más razias (con la triple A en acción plena) y la desaparición luego de Javier Seminario, Orlando Cancio y los hermanos Juan y José Pichulman.

Seminario es yerno de Lucy y el padre de su nieta Cristina. Estudiaba los últimos años de Ingeniería en la Universidad de Challacó, cuyos alumnos sumaron a la lucha por Sapere.

«Es muy fuerte lo que pasó y una experiencia increíble. Los viejos vecinos nos miraban raro cuando llegábamos, creían que íbamos por las elecciones, que éramos de algún partido político. Un hombre que nos atendió de lejos casi se larga a llorar cuando reconoció a los hermanos Pichulman. Los tuvo escondidos acá cuando lo buscaban para llevárselos», contaron Marcos y Richard «Parche» García, dos de los miembros de Hijos.