No logra que operen a su hija en el Castro Rendón

Una madre de Zapala clama por su niña de 9 meses. Una enfermedad impide que su cerebro crezca.

ZAPALA (AZ).- Una joven madre con su beba de nueve meses están viviendo una pesadilla por culpa de la burocracia oficial. La pequeña sufre de craneosinostosis, una afección que impide el crecimiento del cerebro, y debe ser intervenida quirúrgicamente de manera urgente en el hospital Castro Rendón de la capital neuquina pero no obtiene turno.

Las pediatras del hospital zapalino que la atendieron desde que nació ya la derivaron en más de una oportunidad pero a último momento la operación se postergó sin fecha definida y las autoridades del hospital capitalino no se dignaron a brindar una respuesta a los reclamos de la madre. Esta demora genera un gran riesgo para la pequeña que puede sufrir consecuencias neurológicas y retraso madurativo, advirtió la mamá.

El caso fue presentado ante la defensora de Menores de Zapala, Gabriela Calaccio, que en las últimas horas ultimaba los detalles para una presentación para intimar al director del hospital neuquino a «realizar el acto quirúrgico en un término no superior a los quince días».

«Estoy desesperada, no quiero seguir esperando porque tengo miedo por la vida de mi hija pero en el hos

pital Neuquén (por el Castro Rendón) ni siquiera me contestan cuándo la podrán operar». La voz quebrada por el llanto de la madre, Patricia Sáenz, refleja el dolor y la angustia que provoca esta situación poco clara.

El peregrinaje por el sistema de salud comenzó en octubre del año pasado cuando los médicos del hospital de esta ciudad le diagnosticaron craneosinostosis a su hija. Morena, una beba preciosa, debía ser operada en Neuquén y de inmediato comenzaron las gestiones para obtener el turno. Finalmente, y después de mucho reclamar, consiguió que le fijaran fecha para el 23 de marzo.

«Fueron largas horas de angustia porque no es sencillo afrontar una operación de esas características para una beba tan pequeña pero, a último momento, cuando la estaban por llevar a la sala de operaciones me avisaron que se suspendía porque no había quirófano», contó la mujer.

Luego le confirmaron que la intervención se concretaría el 29 de ese mes pero increíblemente el proceso también se postergó pocos minutos antes por una medida de fuerza.

«En Neuquén dicen que no es urgente pero ninguno de los médicos con los que hablé puede garantizar la salud de mi hija si esto se sigue postergando» reclamó Sáenz. «Quiero que esto se resuelva porque no es nada agradable vivir con esta incertidumbre sobre cómo evolucionará la salud de mi nena» concluyó.


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