Cómo será el aumento en cuotas para las naftas

El ministro de Energía, Juan José Aranguren, dio un vuelco radical en su política de libre mercado: intervino el negocio de los combustibles. Él fue quien lo liberó en septiembre del año pasado. Las petroleras aceptaron congelar los precios en los surtidores por dos meses y luego aplicar la suba en ocho cuotas.

¿Cómo es el plan acordado? Las principales operadoras (YPF, Shell, Axion y Oil) aceptaron no trasladar hasta el 1 de julio los aumentos acumulados desde la última suba. Es decir que las productoras de crudo deberán asumir los costos de no poder traducir a precios el movimiento del dólar y del barril internacional.

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Una vez cumplido el plazo los aumentos se podrán aplicar en cuotas durante los siguientes ocho meses. El gobierno les reconoció a las empresas un atraso del 12%. A ese monto debería sumársele lo que ocurra en los dos meses del acuerdo y en los sucesivos que dure el plan de cuotas. Es decir que la aplicación deberá ser gradual.

El ministro Aranguren apuesta a dos frentes. Por un lado reducir el impacto que un aumento de combustibles tendría en la inflación del primer semestre. Por otro, confía en que la cotización del dólar pueda estabilizarse y que los precios internacionales del petróleo bajen tras la tregua. Eso moderaría el mercado para el segundo semestre.

El 80% de las variables que componen el precio de los (tipo de cambio, precio del Brent y cotización de los biocombustibles) están dolarizadas. A eso se suma que el valor de referencia internacional del crudo no tiene anclaje nacional. Por eso para el gobierno es central contener la suba en las naftas ya que considera que tiene traslado directo a la inflación.

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Con la liberación del mercado de los combustibles, y la eliminación del Barril Criollo, el gobierno modificó la estructura impositiva de los combustibles. Pasaron de ser porcentajes del valor a ser montos fijos que se actualizan por inflación. La expectativa era que esa herramienta les permitiera controlar las variables externas para amortiguar un golpe severo al bolsillo de los argentinos. En este caso parece que el instrumento resultó insuficiente.

¿Cómo impacta en la industria petrolera? Según pudo averiguar este medio las petroleras aceptaron el acuerdo en un gesto de “buena voluntad”. No recibirán nada a cambio, aunque la política tarifaria del gobierno les ayudó a mejorar sus cajas en los últimos años. Sin embargo la intervención de algo “sagrado”, como lo es el libre mercado para la industria petrolera, puede traer consecuencias en la confianza de los inversores y en Vaca Muerta.