Néstor Montalbano habló de cine. “No hay caso, soy pesimista”

Néstor Montalbano, realizador de los programas “Todo por dos pesos” y “Cha Cha Cha” y de la película “Soy Tu aventura”, entre otras, estuvo el fin de semana pasado en la región, ya que fue parte del jurado de la sexta edición del Festival Audiovisual Bariloche. Además, presentó sus últimas dos comedias “Pájaros volando” y “No llores por mi, Inglaterra” en el auto cine del festival.

“Ser jurado implica alimentarme de todas las corrientes y las cosas que se están haciendo en el interior del país. Esto es un oasis que hay que defender, promover, más que nada por como está el cine hoy. Son como vertientes y lugares de exposición, los únicos que pueden mantener viva nuestra cultura cinematográfica”, expresó Montalbano en diálogo con “Río Negro”.

P- Después del fuerte impulso que parecía haber tomado el cine nacional en los últimos años, ¿cómo ves la situación actual?

R- Gravísima. No se pueden conseguir recursos fácilmente. A nivel industria, no existe porque no tenemos mercado. Y a nivel independiente, se hace muy caro todo. El problema no sólo está en la realización y en la producción sino también en la exhibición. Si vos hacés algo y los canales de exhibición se te van reduciendo no tiene sentido. No hay política para defender nuestra cinematografía. Las salas van cerrando, el espacio Incaa está en decadencia total y va hacia el muere. Los únicos canales genuinos son estos festivales donde se arman grupos para ver cómo se puede defender todo esto.

P- ¿Qué pasa con otros canales de comunicación como la web?

R- Hoy todo el mundo habla de la web pero no está legislada. No es tan fácil. ¿Quién paga eso? ¿Quién gana algo de guita con eso? Hoy todo el mundo habla de las series. Pero ¿quiénes son los que están produciendo series? Netflix, en Argentina, ya está tomado por 4 o 5 atorrantes que no van a abrir mucho el juego. ¿Qué queda? Amazon. ¿Nos vamos todos a Miami a vender la serie? No hay con qué darle: soy pesimista.

P- ¿Qué proyectos se vienen?

R- Hay varios en puerta. Una serie de Malevo y una película humorística en la casa de Gardel con la mirada puesta en los chicos del barrio. Pero la verdad te cuesta la inspiración porque andamos con un palo en la nuca. Hay descreimiento, escepticismo. Esto es como un túnel que no tiene la luz encendida al final. La situación general te saca la inspiración ¿Qué querés contar?, ¿a quién podés movilizar? Si están todos zombies. Parece el regreso de los muertos vivos. Vos te querés inyectar una pasión, un sentimiento para contar una historia, que las hay. Existen. Por eso, digo que en estos festivales del interior hay como una pureza que a mi me oxigena y me reaviva. Me voy contento con ganas de hacer cosas.

P- El interior sigue quedando relegado en relación a la producción audiovisual aunque ha ido ganando terreno.

R- Yo también vengo del interior y cuando era chico en mi pueblo, 9 de Julio, hacía películas. También existían las crisis pero hacía películas con Super 8 y movilizaba. Son épocas donde hay que generar nuevas ideas para producir de otra manera y mantenerse vivo. Pasa que uno se hizo grande, uno trabaja de esto y se reducen las posibilidades de trabajo. Las producciones se habían reavivado mucho a nivel federal. Yo vi ese crecimiento.

P- ¿Sentís que marcaste una nueva tendencia en la forma de hacer humor con “De la Cabeza”, “Cha cha cha” y “Todo por $2”?

R- No, en absoluto. En ese momento, nos juntamos un grupo de tipos heterogéneos que mirábamos el humor desde el mismo lugar. “De la cabeza” fue un programa anárquico y ese humor nació ante una necesidad. Veníamos de una generación que no creía ni en militares, ni en curas, ni en las instituciones, ni en los políticos. Fue un programa rebelde porque tuvo un espíritu de libertad. Nos dejaron hacer lo que queríamos y eso fue el germen, sumado a una conjunción de tipos con mucho talento. Involuntariamente se generó un nuevo lenguaje con respecto al humor en ese momento. Esta época es muy parecida a los 90.

P- En relación a esa similitud con los 90, ¿no es momento entonces de algo nuevo?

R- Sí, pero es el turno de los jóvenes. Los viejos estamos mañeros. Estamos afianzados con oficio en lo que ya hicimos. Es así la vida. Al pibe hay que darle todo.

¿Quién es?

Néstor Montalbano

Director y guionista de cine, teatro y televisión, integró la camada que vino a renovar la forma de hacer humor en la Argentina, junto a Alfredo Casero, Diego Capusotto, Fabio Alberti, Favio Posca y otros. Dirigió De la cabeza (1992) y luego Cha Cha Cha (1992-1997). En 1998 realizó su primer largometraje, “Cómplices”, un thriller protagonizado por Oscar Martínez y Jorge Marrale. Volvió al humor en 1999 con “Todo por $2”, que escribió, produjo y dirigió junto a Pedro Saborido, Diego Capusotto y Fabio Alberti. En 2003, escribió y dirigió la película “Soy tu aventura”, protagonizada por Diego Capusotto, Luis Luque y el cantante Luis Aguilé. Presentó la película “Pájaros Volando”, donde repite la fórmula Luque-Capusotto, en 2010. Su último film “No Llores por mí, Inglaterra”, una comedia épica que mezcla un acontecimiento histórico en el territorio argentino en 1806 y el fútbol.

El director de “Cha Cha Cha” pasó por Bariloche, donde participó como jurado del sexto Festival Audiovisual Bariloche. En un encuentro con “Río Negro” contó por qué es pesimista sobre el futuro del cine y la tevé y por qué la salida está en las provincias.