Nación sigue evaluando cuándo enviar el proyecto de aborto al Congreso
El Gobierno de Alberto Fernández continúa explorando el momento indicado para enviar al Congreso el proyecto sobre la legalización del aborto, un compromiso anunciado durante la campaña electoral y ratificado durante las últimas semanas por el Presidente.
En los últimos días, fue el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, quien ratificó que el Gobierno nacional está «esperando los tiempos necesarios» para enviar el proyecto y que «se trate como corresponde».
El funcionario debió salir públicamente a ofrecer esas precisiones luego de que la asesora presidencial Dora Barrancos dijera la semana pasada en una entrevista por radio que el proyecto iba a ser enviado en los próximos días.
Los siete meses de aislamiento social por la pandemia de coronavirus, las restricciones impuestas por la cuarentena, la reconfiguración que tuvo que hacer el Congreso para poder funcionar y los esfuerzos del Ministerio de
Salud concentrados exclusivamente en enfrentar la pandemia se presentaron hasta ahora como los principales obstáculos para el envío y tratamiento de la iniciativa.
Dentro del oficialismo se despliegan argumentos a favor y en contra de la oportunidad para enviarlo antes de que termine el 2020, y sectores identificados como ‘verdes’ y ‘celestes’ según su postura frente al proyecto, se debaten internamente sobre cuál es el momento oportuno para mandar al Parlamento la iniciativa.
El proyecto en cuestión ya está redactado por la Secretaría legal de la Presidencia, cuya titular Vilma Ibarra y la ministra de las Mujeres, Elizabeth Gómez Alcorta son las principales impulsoras de la iniciativa dentro del Gabinete. «Todo lo maneja y decide Presidencia», dijeron a Télam desde esa cartera.
Desde la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito prometen «acciones sorpresas» para la semana próxima en la zona del Área Metropolitana de Buenos Aires, y tienen agendada para el miércoles a la tarde una reunión con autoridades de la Cámara de Diputados, por donde ingresaría la iniciativa.
«Vamos a trasladar la preocupación del movimiento en relación a los tiempos acotados para el tratamiento de la Ley IVE en 2020 y en caso de que se habilite, expresar lo que para nosotras son pisos mínimos para el debate como que sea sin ataques, sin fake news ni desinformación sobre el derecho al aborto»,
dijeron fuentes de la campaña a Télam.
Posturas
A la espera de las definiciones presidenciales, los sectores de la sociedad civil a favor y en contra de la iniciativa se mantienen alertas y a la expectativa. Esta semana, las autoridades de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) expresaron que les «sorprende tristemente» las noticias sobre la inminente presentación ante el Congreso del proyecto y consideraron que la situación de la salud pública «hace insostenible e inoportuno cualquier intento de presentar y discutir» una ley de esas características.
«Las últimas noticias sobre la inminente introducción del proyecto de ley de aborto al Congreso Nacional nos sorprenden tristemente porque desalientan la búsqueda del encuentro fraterno e imprescindible entre los argentinos»,
dice el texto de la Comisión Ejecutiva de la CEA, que encabeza el obispo de San Isidro, monseñor Osca Ojea.
También la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina (Aciera) se pronunció con una declaración pública, en la que consideró que «no es tiempo de discutir el aborto».
«Estamos en medio de una pandemia y los sistemas sanitarios están colapsados en diferentes lugares del país, y con récord de muertes diarias, escalando a los primeros lugares del mundo».
ACIERA
La respuesta a los sectores religiosos llegó por parte del secretario de Culto, Guillermo Oliveri, quien consideró que «nadie se puede sorprender» con el proyecto de legalización del aborto y afirmó que el Ejecutivo no está «escondiendo nada debajo del poncho», lo que «facilita el diálogo».
«La idea no es romper ni cortar los puentes. El Presidente nunca ocultó su posición»,
dijo Oliveri.
El funcionario, que integra el círculo íntimo de Fernández, agregó: «Es más, en todas las reuniones (con la Iglesia) el tema lo sacó siempre él, dijo que tenía un compromiso y una posición respecto del tema del aborto. Así que nadie se puede sorprender«.
El duro comunicado del Episcopado de esta semana no cayó por sorpresa en el Gobierno, que viene manteniendo una aceitada relación con los obispos, en todo lo relacionado a la gestión de la pandemia y la asistencia a los sectores más vulnerables.
Oliveri, junto al diputado Eduardo Valdés y el secretario de Asuntos
Estratégicos, Gustavo Beliz, forman parte del núcleo que le aconseja al
Presidente dejar el envío del proyecto para el año que viene y proponen
concretamente que se formalice cuando inaugure las sesiones ordinarias del Congreso, el 1 de marzo de 2021.
«Ahora, generaría un tema de división más en plena pandemia. Todos estamos esperando que pase esta situación para plantear y resolver lo antes posible todos los temas a los que el Gobierno se comprometió; entre ellos la IVE»,
dijo a Télam Valdés.
Agencia Télam.
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