San Martín de los Andes quiere potenciar las ventas con un centro comercial a cielo abierto
La Cámara de Comercio y Turismo local firmó un convenio de desarrollo con la Confederación Argentina de la Mediana Empresa y con el municipio para trabajar en el proyecto con el objetivo de impulsar la actividad.
Comerciantes de San Martín de los Andes quieren promover un centro comercial a cielo abierto para impulsar las ventas. (Foto de archivo de Patricio Rodríguez)
Los comercios del área céntrica de San Martín de los Andes iniciaron gestiones para delimitar un área con pautas específicas, con la mira puesta en generar mayores atractivos y multiplicar los volúmenes de venta. El llamado “centro comercial a cielo abierto” busca replicar experiencias similares que han dado buen resultado en otros puntos del país y que necesitan obligadamente “un trabajo conjunto público-privado permanente”, señalaron sus promotores.
Con ese fin la Cámara de Comercio y Turismo de San Martín firmó un convenio de desarrollo con la Confederación Argentina de la Mediana Empresa y con el municipio local. El intendente Carlos Saloniti asumió el compromiso de aportar lo que le toca al Estado, en materia de renovación de veredas, iluminación y colocación de nuevo mobiliario urbano.
Acuerdos similares fueron firmados la última semana en Villa La Angostura y Junín de los Andes, según precisó el presidente de la Federación de Entidades Empresarias Neuquinas, Lucas Mántaras.
En San Martín el centro comercial a cielo abierto abarcaría en principio a unos 300 locales de una gran variedad de rubros, en un perímetro comprendido por las calles Roca, San Martín y Villegas, entre Cacique Curruhinca y la Costanera.
Mántaras dijo que está calculado que la implementación de un centro comercial con esos criterios permite potenciar las ventas en un 50%.
La Cámara de Comercio de San Martín anticipó que para concretar el centro comercial a cielo abierto será necesaria la renovación de veredas, la “puesta en valor” de edificios, la ampliación del espacio peatonal, la instalación de señalética, mejoras de iluminación y la colocación de nuevo mobiliario urbano.
Los comercios interesados en sumarse deberán “nuclearse y organizarse” para el logro del objetivo. La figura podría ser un consorcio, con una comisión directiva para la toma de decisiones y un “gerenciamiento” operativo.
Mántaras dijo que la tendencia para este tipo de complejos en todo el mundo incluye la progresiva restricción al tránsito vehicular y al estacionamiento dentro del área involucrada. El ejemplo que miran es el de Bariloche, donde la calle Mitre (epicentro de la actividad comercial) quedó vedada al estacionamiento hace más de dos años y funciona como peatonal en tiempos de alta temporada turística.
El cambio de hábitos que se busca promover de ese modo incluye los desplazamientos más largos, para que el potencial cliente deba recorrer una cierta distancia entre el lugar donde deja el auto y el comercio elegido, lo cual le abre oportunidades a otros comercios, ya que perdería prioridad el concepto de “estacionar en la puerta”.
El directivo dijo también que uno de los criterios que se podrían aplicar en San Martín es el de generar atractivos nuevos para incentivar la extensión de las recorridas y paseos. Citó el caso de la ciudad italiana de Florencia donde se emplazan estatuas en sitios comerciales periféricos con buen resultado, porque distribuyen mejor y amplían la circulación del público.
Según señaló la cámara sanmartinense, entre otros objetivos, los centros comerciales a cielo abierto apuntan a “mejorar la rentabilidad, aumentar la generación de empleo, generar vínculos institucionales, facilitar herramientas de financiación para todos los comercios, ayudar a la profesionalización del comercio y promover la realización de actividades promocionales en fechas específicas” como el Día del Padre.
Mántaras dijo que el plan promovido por la Came se funda en casos “emblema” como el de Villa General Belgrano, en Córdoba, donde la actividad económica logró un importante impulso con el centro comercial a cielo abierto y hoy exhibe una estética propia y reconocida, por ejemplo con la instalación de “decks gastronómicos que se replican también en otros tipos de comercios”.
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