Mi Bus pidió un aumento del 112% en el boleto del transporte urbano de Bariloche
La empresa formalizó su planteo y está bajo análisis. El último incremento se aplicó en noviembre pasado, que llevó la tarifa a 62 pesos. Se debe llamar a audiencia pública.
LFoto: Archivo
La empresa Amancay SRL pidió al municipio de Bariloche un aumento tarifario que llevaría el precio del boleto en esta ciudad a 132 pesos, lo justificó en el aumento de costos acumulado desde la última revisión y pidió su “inmediato tratamiento” con el fin de “no seguir agravando la situación” que afectaría hoy a la prestadora.
La concesionaria del transporte urbano -que presta el servicio con el nombre comercial Mi Bus- realizó su presentación el pasado 28 de marzo, pero no trascendió hasta hoy.
Según el cálculo aportado por la empresa, el costo de prestación global es de 1.217.097.000 pesos anuales y la tarifa para cubrir esas erogaciones debería ser de 132,61 pesos. Esa cifra es más del doble de lo que pagan hoy los pasajeros, pero queda por detrás de la que estimó y difundió el propio municipio.
En una publicación efectuada el último fin de semana -casi como una preparación del terreno para el debate que se viene- el gobierno del intendente Gennuso señaló que “las proyecciones para 2022 según la evolución de precios progamada, alcanzaría los 140 pesos para el costo del boleto, trazando un promedio anual. Esto sin tener en cuenta los subsidios”.
Según el gobierno municipal, aun con la actualización de la tarifa según ese parámetro, “viajar en ómnibus seguiría valiendo menos que un alfajor”.
Los costos desagregados que presentó la empresa
Amancay describió en su informe técnico cada uno de los ítems de gasto, del cual se desprende por ejemplo que tiene 227 empleados y un costo anual en salarios de 488,4 millones de pesos. A ese número se le suman 190,8 millones de combustibles, 106,7 millones de “neumáticos, cámaras y protectores” y 134,3 millones de repuestos y reparaciones.
El largo detalle incluye 13,6 millones de pesos en impuestos y tasas, 13,8 millones de “gastos generales” (que abarcan desde gas, luz y teléfono hasta seguros y honorarios) y 7,5 millones de alquileres y “mantenimiento de inmuebles”.
Amancay también contabiliza ingresos de “subsidios y compensaciones” por 429 millones de pesos y para determinar la tarifa final coteja el conjunto de costos con los kilómetros recorridos (4,55 millones de kilómetros) y la cantidad de pasajeros transportados al año, que cifró en 8,2 millones de pesos. Ese número es menor que los 11,5 millones de usuarios del servicio que estima el municipio, pero que incluyen a quienes viajan gratis (en especial los estudiantes), y que aun así “está lejos de aquellos 14 millones pre Covid-19”.
La rentabilidad de la concesionaria del transporte en Bariloche
El desglose aportado por Amancay precisa al fin que el “costo por pasajero transportado” es de 96,01 pesos. Al aplicarle la “rentabilidad mínima asegurada” -el contrato autoriza un ”equivalente como máximo al 20%”-, el precio final subiría a 120,01, y con IVA incluido, a 132,61 pesos.
El gerente de la empresa, Juan Pablo Follonier, recordó hoy que el último pedido de actualización tarifaria que presentaron data de 2020 y que “llevó varios meses” de análisis. En aquel momento pidieron 97 pesos. El municipio recién convalidó el 27 de junio de 2021 la aplicación de un boleto de 52 pesos a partir de esa fecha y un suba extra a 62 pesos desde el 1 de noviembre.
“Luego hubo un período sin actualización debido a la pandemia –afirmó el directivo-, pero el proceso inflacionario disparó los costos”. Admitió que el precio del boleto aprobado por el gobierno municipal “generalmente es político”, lo cual “trae otras consecuencias, como queda a la vista”.
El concejal Gerardo del Río (PUL) dijo que en la comisión de seguimiento del transporte recién “en la reunión del último martes” tomaron conocimiento del pedido de Mi Bus. Señaló que hay contadores de su bloque y de otros en pleno proceso de evaluación y no descartó que la presentación “arrastre gruesos errores en la metodología”, como las que ya señaló el propio Del Río en el proceso de revisión anterior y que fueron desestimadas.
El Ejecutivo debe ahora realizar su propia evaluación técnica de la estructura de costos del transporte y llamará a audiencia pública, antes de determinar la nueva tarifa, para lo cual no tiene plazos.
Comentarios