Limay hoy te vuelvo a ver besando el Neuquén
Emprendimientos privados ofrecen la oportunidad de flotadas en el Limay. Llegan hasta la mágica confluencia de los ríos.
El río era inaccesible. Eso ha intentado cambiar Sebastián Rivanera, propietario de Sendas Patagónicas, un emprendimiento de servicios turísticos que, entre otras cosas, realiza flotadas en balsa por el río desde la Isla 132 hasta la confluencia con el río Neuquén, sitio emblemático, pero de difícil acceso.
“Nosotros hicimos una inversión en turismo activo, donde las personas participan de cada excursión”, explicó el emprendedor sobre su proyecto, iniciado hace más de 15 años.
La flotada, elegida por decenas de locales y turistas, parte desde el Paseo de la Costa, bordea la península Hiroki y culmina en la Isla Jordán, ya en aguas del río Negro.
En el medio se puede observar la rica flora y fauna de la región, especialmente las aves que habitan la zona ribereña, donde la urbanización aún no llegó. “Cuando terminó la primera excursión que hicimos, la gente se bajó y aplaudió. Ahí nos dimos cuenta que habíamos acertado con la idea”, recordó Rivanera.
La excursión es mayormente requerida en verano y para esta temporada se estima un valor aproximado de 48.000 pesos por balsa, la cual posee capacidad para ocho personas.
Diego Cayol, secretario de Turismo de Neuquén, mencionó que “ya hay 64 prestadores de servicios” vinculados al Limay. Para el próximo año se buscará apuntalar al sector con la construcción de un muelle flotante en la Isla 132. “Será exclusivo para la excursiones”, precisó.
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