Las claves para destrabar el conflicto sindical en Cipolletti
El Ejecutivo intentará negociar con el descuento de los días no trabajados. No se abrirá la paritaria, pero el municipio deberá ceder ante el reclamo de Soyem para evitar nuevas medidas de fuerza.
El primer encuentro entre el gremio Soyem y el Poder Ejecutivo de Cipolletti no arrojó ninguna solución y, como se preveía, sirvió para medir fuerzas y posturas de cara a la reunión que mantendrá el próximo martes y que será definitiva en la puja de poder.
La subsecretaría de Trabajo dispuso la conciliación obligatoria la semana pasada y calmó la tensión al menos por dos semanas. Es que un grupo de municipales tomó una sede municipal la semana pasada, impidió la salida de vehículo y obligó al municipio a solicitar a Trabajo que intervenga.
Es la segunda vez que la cartera provincial intercede en la puja que se originó tras el acuerdo paritario entre el municipio y los otros tres gremios municipales: ATE, UPCN y Sitramuci. Los delegados de Soyem no estuvieron de acuerdo con el convenio que fija un incremento del 28% en tres tramos para el segundo semestre y fijó medidas de fuerzas.
Decidieron iniciar un paro indeterminado que rápidamente se sintió en la ciudad por la falta de mantenimiento, uno de los servicios que más se afectó fue la recolección de basura.
De la reunión de hoy quedó claro que no se reabrirá la paritaria, que era la principal demanda de Soyem, pero se buscará una solución alternativa. Sin embargo, por el momento no hubo ofrecimientos concretos.
La principal carta de negociación que tiene el Ejecutivo son los descuentos de los días no trabajados por parte de los empleados municipales. En un primero momento, el Ejecutivo comunicó que descontaría las horas no trabajadas.
Con la tensión en el conflicto, el paro sumó cerca de siete días lo que tendrá un impacto muy severo en el salario de muchos operarios. Especialmente en las categorías más bajas que ganan entre 50 y 60 mil pesos.
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