La fiscalía pidió medidas por supuesto pedido de coimas en la municipalidad de Neuquén
El fiscal Diego Azcárate está en etapa de investigación y aún no formuló imputaciones. Investiga por cohecho.
La denuncia del comerciante por el pedido de coimas que recibió en forma telefónica tras salir de hacer trámites en la subsecretaría de Comercio de la municipalidad de Neuquén, está en etapa de recolección de información y no llegó a las imputaciones.
El pedido de investigación fue planteado en octubre por el comerciante Vito Gómez y está en manos de la fiscalía de atención al público y asignación de casos, que definirá la continuidad del expediente según la información que recolecte tras colectar datos como registros fílmicos y los expedientes administrativos que solicitó a la ciudad.
El fiscal Diego Azcárarte solicitó videos, información a las empresas de telefonía y los registros de turnos en la dirección de comercio.
La municipalidad remitió información y no se constituyó como querellante, como lo informó inicialmente.
El denunciante amplió los primeros días de diciembre la denuncia con la indicación de que el funcionario al que le señalaron telefónicamente que debía remitir el dinero para destrabar la habilitación de su carrito, es la pareja de la funcionaria a cargo del área de Comercio de la ciudad.
Y pidió también que se revise la actuación de la persona que le llevaba los trámites desde mesa de entradas. Pero la fiscalía de Azcárate definirá primero qué trámite hace a la denuncia por cohecho, en función de los elementos que tiene, antes de tomar otras definiciones.
El pedido de coimas se produjo supuestamente en abril, cuando Gómez estaba en la vereda de la subsecretaria de Comercio de Neuquén y se iba del lugar con nuevas indicaciones sobre cómo habilitar el carrito de comidas. Según el denunciante, había realizado muchas incorporaciones al lugar para la venta de comida rápida y siempre que regresaba para conseguir la habilitación, se iba sin el permiso pero con nuevas indicaciones de inversiones o papeles que debía tramitar.
La llamada telefónica fue para advertirle que los requisitos no cesarían hasta que pagara una suma importante de dinero a una persona que, llamativamente, no trabaja en el lugar sino que se desempeña en la subsecretaría de Desarrollo Social.
El supuesto recaudador de la maniobra ilegal trabajaba hasta noviembre en el área de control de los subsidios y planes, pero no es uno de los imputados en la causa por maniobras irregulares.
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