El municipio de Bariloche debió postergar el cobro del acceso al parque Llao Llao
Es una idea que surgió el año pasado, estaba todo listo para tercerizar el servicio pero la empresa desistió. La propuesta surgió en el ente que administra el área y tendría tres puntos de pago.
El proyecto de imponer el ingreso pago al parque municipal Llao Llao, en Bariloche, que hasta ahora es gratuito, quedó para otra oportunidad. El ente autárquico que administra esa área protegida ubicada al oeste del ejido tenía la intención de aplicar el arancelamiento este verano, pero por ahora no hubo cambio alguno.
El secretario municipal de Ambiente y Desarrollo Urbano y presidente del ente, Claudio Otano, dijo que la postergación de los planes se debe a que “desistió la empresa que se iba a hacer cargo”.
Según indicó el funcionario, la firma London Supply estaba interesada en administrar los puestos de control y cobro. La misma que tiene a su cargo la concesión de Parques Nacionales para la explotación de puerto Pañuelo, lindante con el parque.
Otano aseguró que el ente Llao Llao no tiene personal para asignar a la tarea de cobro, que se efectuaría en al menos tres puestos, sobre los circuitos más concurridos. Y por eso la variante a mano es tercerizarlo, acuerdo mediante con una empresa privada, que cobraría una comisión.
RÍO NEGRO le preguntó si el acuerdo no debía estar precedido de una licitación pública, pero Otano aseguró que no hacía falta, porque el Ente es “autárquico” y puede efectuar ese tipo de contrataciones.
Lo singular es que no todos en el Ente Llao Llao están al tanto del acercamiento con London Supply. Uno de los representantes del Concejo Municipal en ese organismo mixto es Marcelo Casas (Frente de Todos), quien afirmó que “existe desde hace tiempo la idea de arancelar” el ingreso solo de turistas (no de residentes), y si hubo demoras es por la necesidad de “afinar el sistema”. Pero se sorprendió al escuchar el dato sobre la empresa administradora del puerto.
Señaló que de lo único que se habló en reuniones del ente fue de asignar el rol de cobradores del ingreso a estudiantes de la carrera de Turismo de la UNRN, a través de un convenio de pasantías.
Dijo que para instrumentar el cobro el ente también debería resolver algunas cuestiones operativas como “sacar un CUIT específico”, requisito que nunca se cumplió y por eso esta temporada el ingreso se mantiene libre y gratuito.
Ya en julio pasado Otano había adelantado la voluntad de cobrar el ingreso. Dijo que se trataba de un proyecto de hace al menos 20 añosy la única forma de obtener “ingresos genuinos” para desarrollar obras y mejoras en el área protegida.
Dijo que “en casi todo el mundo” ese tipo de reservas naturales tienen entrada paga, como pasa también en el país con los parques nacionales. En aquel momento señaló que la entrada podía ser de 150 pesos para los visitantes nacionales y un monto mayor para extranjeros, aunque esos valores ya habrían quedado desactualizados.
El parque Llao Llao es una valiosa formación de bosque nativo, enmarcado por los lagos Moreno y Nahuel Huapi, con una superficie total de 1.220 hectáreas.
Otano aseguró que “no existe un parque así en todo el país”. Dijo que una buena parte de los turistas que visitan Bariloche ingresa al menos una vez al parque Llao Llao y calculó que el potencial de cobro rondaría entre las 200.000 y 300.000 entradas anuales.
La idea inicial fue establecer puntos de cobro en el ingreso al mirador del brazo Tristeza, en el sendero del bosquecito de arrayanes y en el que lleva al “puente romano”. El tránsito vehicular por el Circuito Chico no estaría arancelado.
Según Otano, la recaudación superaría largamente el presupuesto que hoy tiene el ente, que sale de Rentas Generales y no supera los 2 millones de pesos por año. El recurso extra -completó- podría usarse enteramente para realizar obras en Llao Llao, “a diferencia de lo que ocurre en Parques Nacionales, donde el dinero va a Buenos Aires y se redistribuye solo de manera parcial”.
Entre otros proyectos, el ente invertiría en cartelería, prevención de incendios, mantenimiento de los senderos y miradores, y también en terminar el importante edificio que encaró la Nación para construir un centro de interpretación y núcleo sanitario, y que quedó inconcluso.
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