El municipio de Bariloche analiza obras para descomprimir el tránsito
El gobierno difundió los resultados de la prueba piloto que realizó en el verano. Admitió que existe un "nudo" en la intersección de las cinco esquinas de Belgrano y en el oeste.
La avenida Bustillo tuvo ensayos de mano única y suspensión de semáforos en busca de alternativas para mejorar el tránsito. Archivo
Con los resultados y las cifras en mano de la prueba piloto del verano en la que se realizaron cambios temporales en la circulación de la avenida Bustillo, la Municipalidad de Bariloche concluyó que se necesitan “intervenciones de obra pública” para descomprimir el tránsito.
“La mejora en la fluidez en los kilómetros, requiere intervenciones de obra pública, ya sea acelerar las existentes, como en el caso del kilómetro 1; como también en vías complementarias, para descomprimir las limitaciones estructurales de Bustillo, a partir del kilómetro 8”, concluyó el Ejecutivo en un informe que difundió hoy con los resultados del ensayo de tránsito que realizó en febrero.
En esa prueba piloto, se dejó un tramo de la avenida Bustillo (desde el Kilómetro 8 al Monolito) de una única mano y se aplicaron cambios en los semáforos de los Kilómetros 8.500 y 12.500.
El gobierno local no anticipó qué cambios u obras podrían generarse ni tampoco plazos. Lo cierto es que hoy la circulación en el kilómetro 1 de Bustillo, en la zona del Monolito, es más fluida debido a que terminaron las obras que afectaron seriamente durante un año, pero las demoras en Bustillo se mantienen.
El municipio indicó que “en cualquier intervención que se determine, el centro de la ciudad es el factor clave, por ello haber confirmado las intersecciones críticas, y jerarquizar prioridades como lo es Belgrano y 20 de Febrero, es una oportunidad para proyectar acciones en el corto plazo”.
Los cambios con la prueba piloto
Según el informe municipal, en el tramo desde el Kilómetro 12.400 hasta el 1, “fue posible mejorar el caudal de vehículos sentido oeste- este, 1.420 promedio por hora”.
Agregó que se “contribuyó a las frecuencias y tiempo de viaje del TUP (transporte urbano), mejorando en un 30% las frecuencias y tiempo de viaje en 20 minutos promedio”.
También concluyeron que un 59% de las personas encuestadas que circularon por Bustillo el día de la intervención, demoraron menos, entre 30 y 60 minutos, mientras que el fin de semana anterior a esta prueba piloto ese tiempo era de 60 a 90 minutos.
La contracara de este resultado positivo ocurrió en el centro de Bariloche, según admitió el municipio, que precisó que “se registró una congestión” y el punto clave fue la intersección de Belgrano y 20 de Febrero, donde se encuentran las llamadas cinco esquinas con semáforos.
Respecto a la intervención en los semáforos de la avenida Bustillo, que se realizó una semana después del cambio de circulación, se registró un volumen de 640 vehículos por hora y “mejoró la fluidez, sobre todo en el tramo definido entre Kilómetro 13 y 1, sin embargo sigue presentando un patrón común de tránsito lento del Kilómetro 13 al 18, demandando evaluar otras alternativas”.
Este día, el transporte urbano mejoró en 10 minutos promedio la demora en su recorrido por la avenida Bustillo.
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