El arduo trabajo de recuperar y extender el arbolado urbano en Bariloche
En la Costanera en 2019 se plantaron cien árboles que crecieron. El municipio tiene previsto colocar 1.200 árboles y 3.000 arbustos.
En la Costanera de Bariloche quitaron algunos pinos y plantaron especies nativas que ya toman tamaño. Foto: Marcelo Martinez
Casi un 95% de éxito consiguió el municipio de Bariloche con los árboles plantados en 2019 en la avenida Costanera como parte de un vasto plan para reemplazar a futuro los pinos que caracterizan ese bulevar y que en parte ya fueron eliminados.
Campañas similares lograron cambiarle parcialmente la cara al “paseo del Este”, que brindó una nueva estética al principal ingreso a Bariloche. En menor medida, los pequeños árboles con sus “corralitos” de protección también empezaron a tener presencia visible en el paseo del Oeste y en el paseo Sur, sobre la avenida Juan Hermann.
El subsecretario de Espacios Públicos, Juan Arenas, dijo que el trabajo desplegado lleva un esfuerzo y una inversión importante pero a esta altura ya permite ver “resultados” y puso como primer ejemplo a la Costanera 12 de Octubre, donde plantaron cien árboles, algunos de gran porte, que en su mayoría han resistido el viento y la sequía, y son no más de “cuatro o cinco” los que no prosperaron.
Arenas dijo que la prioridad es trabajar todo lo que se pueda con especies autóctonas. Por eso, intercalados con los pinos que ya tienen sesenta años y una altura considerable, colocaron robles pellín, raulíes y ñires, además de algunas hayas coloradas, de origen foráneo.
En lo inmediato, el área a su cargo trabajará en el arbolado y embellecimiento de la avenida Esandi, que tiene una extensión de 3,5 kilómetros y hoy luce abandonada. Allí el municipio tiene previsto colocar 1.200 árboles y 3.000 arbustos, que ya fueron encargados, con una inversión de 4 millones de pesos.
Arenas explicó que la intención inicial de poner autóctonas choca con la limitación de los viveros, porque “nadie produce nativas en ese volumen. Es un gran problema que tiene Bariloche”. El municipio realiza compras a proveedores de esta ciudad y también en El Bolsón, pero no alcanza, por eso está previsto mezclar notros y maitenes, con fresnos y otras especies exóticas, de crecimiento rápido.
El responsable de Parques y Jardines dijo que la avenida Esandi “no es un ambiente fácil porque ya es área de ecotono, es decir de transición a la estepa”, con condiciones climáticas más hostiles que debe ser tomadas en cuenta. Explicó que los árboles serán emplazados en las veredas y los arbustos (hebes, lavanda, cola de zorro, entre otros) irán en las plazoletas centrales de la avenida, “más que nada para cortar la línea de luz” de los vehículos.
Los trabajos de movimiento de suelo comenzarán después de Semana Santa. Al igual que en la costanera está previsto instalar “riego dirigido”, por medio de tambores enterrados para cada árbol, que son llenados con agua trasladada en camiones, con frecuencia semanal. Arenas dijo que ese sistema ya fue probado en la 12 de Octubre, donde las plantas están a punto de cumplir tres años y lograron una sobrevida “del 92 al 94%”. Para las arbustivas habrá riego por goteo.
Acompañamiento y algunas críticas por el plan de arbolado
El tratamiento y cuidado del arbolado urbano fue muchas veces motivo de polémica, y de críticas por el escaso cuidado que le dedicaba el municipio. Arenas dijo que la inversión en esa materia se multiplicó en los últimos años y la comunidad lo nota cada vez más.
“Creo que hay un gran cambio, desde que se empezaron a mejorar los espacios públicos. Son espacios que se ganaron y que no estaban. La gente lo valora y la participación es importante. Pero cuestionamientos hay siempre”, dijo Arenas.
Señaló que los trabajos encarados por el municipio en los espacios señalados son “de parquización, no de forestación”, que demandaría otra densidad. Refirió que buena parte de las acciones están dirigidas a reponer plantas allí donde se deben eliminar.
Dijo que son muchos los árboles que se sacan “porque están sobremaduras, por problemas de cloacas o también las que extraen los particulares, por ejemplo en los nuevos loteos, donde han desaparecido gran cantidad de notros y maitenes”.
Otro paradigma, el cambio de los antiguos pinos de la Costanera
Sobre los árboles emplazados en la Costanera, que en algunos casos ya lograron alturas de seis y siete metros, Arenas reconoció que el plan integral comprende la tala de los antiguos pinos. Pero no avanzarán por ahora en ese sentido “porque hay una cautelar vigente, que impulsó la organización Árbol de Pie” y si quieren sacar los árboles que representan riesgo “habrá que negociar uno por uno”.
En el tramo de Costanera entre Quaglia y Palacios, donde ya sacaron varios pinos por la obra del colector cloacal y no hubo reposición, el funcionario dijo que está previsto colocar nuevos ejemplares de hoja caduca “entre este otoño y el principio de la primavera”.
Refirió que también hay trabajos en marcha en el paseo del Oeste, donde hay una obra de riego y ya fueron plantados entre 300 y 400 ejemplares, lo mismo que en el paseo del Sur “donde no había nada de nada” y el municipio colocó 300 árboles.
Arenas dijo que ese tipo de trabajos “son para ver a muchos años, para las futuras generaciones”, que es el modo en el que también las planearon hace décadas los impulsores de las áreas parquizadas que hoy conserva la ciudad en la zona céntrica.
Destacó como una decisión acertada la colocación de arrayanes en la nueva calle Mitre, en la que participaron los propios comerciantes, quienes eligieron esa especie y lograron modificar algunas de las ideas iniciales de los responsables de la obra. Casi todos esos árboles alcanzaron importante desarrollo y hay solo 3 ó 4 que se secaron y serán reemplazados.
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