Denuncian discriminación en las exigencias del plan Calor en Bariloche
Los beneficiarios deben presentar una certificación de Anses y por esta documentación muchas familias que necesitan la leña quedarían afuera del programa. El municipio dijo que se aplica desde el año pasado, ante el rumor de venta del material.
El municipio de Bariloche inició el acopio de leña para distribuir el próximo invierno. Foto: archivo
Los candidatos a legisladores por Unidad Popular Luis Suero y Fabián Tummino denunciaron que el municipio de Bariloche comenzó a exigir una certificación de la Anses para el acceso al plan Calor que excluye de ese beneficio a quienes tienen un ingreso regular por empleo o jubilación, incluso a los trabajadores temporales.
Pero desde el municipio señalaron que ese requisito “ya existía el año pasado” y el mecanismo está pensado para no dejar afuera a nadie que carezca de gas de red y tenga la necesidad.
Los referentes del frente Somos Unidad Popular y Social dijeron que la exigencia de una “certificación negativa de Anses” pone trabas a los potenciales beneficiarios del plan Calor y se trata de una restricción nueva, que hasta ahora no existía, ya que los interesados accedían solo con inscribirse en el listado de admisión.
El plan Calor municipal distribuyó el año pasado unos 8.000 metros cúbicos de leña entre familias que no cuentan con acceso al gas de red. Suele repartirse en dos entregas y la primera ronda, por lo general, comienza a mediados de mayo.
La subsecretaria de Políticas Sociales, Paula Barberis, dijo que hasta el invierno pasado lo recibieron entre 3.800 y 4.000 personas y que no está previsto para este año ningún recorte. Desmintió que el pedido de tramitar la “negativa de la Anses” sea algo nuevo. “Ya estuvo vigente el año pasado y se implementó ante el run run de que había gente que no necesitaba la leña y la retiraba para vender”, aseguró.
Según Barberis, la Anses solo le niega el documento habilitante a los trabajadores asalariados en blanco y a los jubilados que cobran por encima de la mínima. Dijo que los trabajadores informales, beneficiarios de planes como el Potenciar Trabajo y jubilados que perciben la remuneración mínima califican para el plan. Aseguró también que la provincia exige el mismo certificado para el otorgamiento de garrafas gratuitas.
Pero esa supuesta flexibilidad no es tal según señalaron algunos aspirantes. Belén es madre cabeza de familia, con tres hijos, y la Anses no le extendió la “negativa” porque es monotributista social. Dijo que tiene trabajo esporádico como mucama “por horas” y eso bastó para que la excluyan del plan Calor. Vive en el barrio Alun Ruca y dijo que conoce vecinas y vecinos que están en su misma situación.
Belén contó que años atrás recibía el plan Calor sin obstáculo alguno, el año pasado desistió por un “maltrato” que atribuyó a la dirigente barrial que organizaba el operativo y este año decidió volver, pero se encontró con el impedimento de la Anses.
Dijo que si el municipio considera casos especiales como el suyo “no lo informaron por ningún lado y una no sabe a dónde ir”.
Carrera de obstáculos
Luis Suero refirió que el costo de calefaccionarse con leña y gas es muy alto aun para la gente que tiene trabajo y un ingreso regular. Dijo que recogieron la inquietud “en distintas recorridas barriales”.
Según Suero, el requisito impuesto por el municipio es discriminatorio porque hay personas que quedan impedidas de entrar al plan Calor si están en el Potenciar Trabajo o si figuran como beneficiarios de la obra social a la que se accede con ese plan. “Estos dos derechos no pueden ser excluyentes”, afirmó.
Según el candidato, les llegó la preocupación a través de grupos de vecinos para quienes el plan Calor es muy esperado en cada temporada invernal, incluso para “los trabajadores monotributistas” o los que tuvieron empleo temporario en el verano y que no pueden obtener en la Anses la habilitación para retirar la leña.
Barberis dijo que los aspirantes a recibir el plan Calor deben cumplir la gestión ante el organismo previsional, que se pensó el año pasado como un requisito mínimo que fuera más allá de la simple inscripción, pero que no es estricto ni excluyente. “Si hay personas que tuvieron trabajo temporario y la Anses todavía no les dio la baja, o tienen ingresos bajos y familia a cargo, se contemplan los casos -agregó la funcionaria-. Se tienen que presentar a su junta vecinal o al Caat, y está previsto incorporarlos”.
Insistió en que el plan Calor tiene un volumen similar al del año pasado y en general no se da de baja a los beneficiarios que cumplen las condiciones. “Los referentes barriales los conocen y en general no hay problemas con los listados”, aseguró.
Dijo que solo se da de baja a los que acceden al gas de red. Admitió que ese servicio está disponible en muchos barrios como Malvinas, Nahuel Hue y algunos del oeste, pero “la gente no puede hacer su conexión interna por el altísimo costo”.
Comentarios