Mujeres trans tienen su refugio en Neuquén después de tres años de espera
Son 12 departamentos que se inauguraron hoy. El Municipio le cedió el terreno a las Carmelitas Descalzas y la Provincia construyó el edificio.
La llave como un símbolo en la mano permite adivinar la sonrisa que se esconde detrás de los barbijos. (Oscar Livera).-
Hoy quedó oficialmente inaugurado el refugio para mujeres trans de Neuquén capital. En 2017, el Municipio cedió el terreno al Monasterio de las Carmelitas Descalzas y fue la Provincia la encargada de la construcción de 12 departamentos y un salón de usos múltiples. Tres años demoró el edificio que surgió de un pedido hecho hace 14, cuando una mujer trans le pidió a la monja Mónica Astorga unas «sábanas limpias para morir».
Así lo recordó Luján Acuña, referente de Conciencia VIHda y Vidas Escondidas, en diálogo con «Vos a diario», quien resaltó que ese momento fue clave en la decisión de la hermana Astorga para trabajar por los derechos de las mujeres trans. Explicó que la anécdota surge del acompañamiento que realizaban, junto a Katiana Villagra, a sus compañeras enfermas, que eran llevadas a domicilios porque los hospitales «no las podían tener».
Acuña recordó que uno de los avances más importantes que han realizado junto a Astorga es el del taller textil que dirige Villagra, como posibilidad laboral. «Ocasionó que quisiéramos más, que pensáramos en más cosas», contó la referente, deseo que fue acompañado por la monja.
Quien también reconoció el trabajo de Astorga fue el presidente de ADUS-IPVU, Marcelo Sampablo: «en definitiva ella generó la expectativa de este trabajo colectivo y mancomunado». El funcionario resaltó que es una experiencia única en el país y que se trata de un mecanismo interesante para mejorar la calidad de vida del colectivo trans.
En julio del 2017, el por entonces intendente Horacio «Pechi» Quiroga le entregó el terreno en el barrio Confluencia a la congregación de monjas. En septiembre de ese año, el gobernador Omar Gutiérrez ordenó la obra. Así se construyeron 12 departamentos de una habitación, de 40 metros cuadrados, y un salón de usos múltiples. El refugio será gestionado por las Carmelitas Descalzas y quienes se alojen deberán cumplir con pautas de convivencia, además, si queda libre algún espacio, se le otorgará a otra mujer que lo necesite.
El hecho significó un gran avance en materia de políticas públicas para la población trans en una provincia en la que tienen un promedio de vida de 42 años y según el único relevamiento hecho sobre el tema, en 2017, el 45% tuvo problemas para alquilar una vivienda, ya sean económicos o por discriminación.
Ahora, hay dos proyectos de los que se espera tener novedades en el corto plazo. Uno es del cupo laboral trans en las sedes municipales de Neuquén capital. Se esperaba que se debata sobre tablas en el Deliberante, pero no se cumplió el acuerdo verbal previo y no reunió los votos para que ingrese sin pasar por las comisiones. Este jueves la iniciativa volverá al recinto y, a la luz del respaldo político con el que ya contaba, se convertirá en norma.
El otro es de una ley integral trans, que amplíe la mirada, ya no solo a la población en edad laboral (como pasa con el cupo trans) sino que incluya a las infancias, adolescencia y tercera edad. El proyecto fue presentado en marzo, pero la Asamblea provincial de personas trans -aclaró Acuña- está trabajando en su ampliación y consenso.
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