Mediación judicial obligatoria en Río Negro

VIEDMA (AV).- Desde mañana será obligatoria la mediación judicial en Río Negro. Por ahora se comenzará con cuestiones patrimoniales vinculadas a daños y perjuicios derivados de delitos y cuasi delitos, como por ejemplo, el daño sufrido por un accidente de tránsito, desalojos, ejecución de expensas y revisión de contratos en virtud de la legislación que se dictó con la salida de la convertibilidad.

En materia de familia la mediación será obligatoria para las cuestiones de liquidación de sociedad conyugal, régimen de visitas y tenencias. Pero quedarán excluidos las cuotas alimentarias ante la imposibilidad de una atención satisfactoria por la cantidad de mediadores que harían falta para prestar este servicio frente a tantos casos.

La mediación es un método alternativo más de resolución de disputas judiciales «muy satisfactorio y frente a una conflictividad creciente una respuesta rápida y económica para las par- tes», sostuvo el director del Centro Judicial de Mediación Viedma, Juan Pablo Videla.

Destacó que este método ha alcanzado un importante porcentaje de acuerdos en la Capital Federal (40%), «lo que demuestra que al aumento de los litigios no se lo debe afrontar con un incremento de estructura jurisdiccional para que tengamos más jueces y sentencias sino que la mejor solución es el diálogo que propone la mediación».

Explicó que desde el Poder Judicial de Río Negro se trató de implementar este sistema basado en el principio de la voluntad, es decir, «cuando el conflicto ya estaba instalado en forma de juicio ante un Tribunal, el juez debía invitar a las partes para informarles en qué consistía esta herramienta y en el caso de estar de acuerdo derivar el tema a la mediación».

El camarista civil detalló que la experiencia rionegrina de casi dos años de regir ese principio de voluntad «no dio los resultados esperados».

En la Primera Circunscripción Judicial, por ejemplo, sólo se concretaron 18 casos de mediación en ese tiempo, lo que «no justifica la predisposición de recursos humanos, edilicios, presupuestarios y todo lo demás que se puso a disposición de este nuevo servicio».

La obligatoriedad

Por esta razón el STJ resolvió implementar la obliga

toriedad en forma gradual.

En primera instancia se empezará con algunas materias del ámbito civil para que tanto los abogados, mediadores y todos los operadores del sistema adquieran su propia percepción de cómo funciona la mediación y en el camino incrementar esta solución para otros campos de la conflictividad.

Videla puntualizó que la mediación es significativamente más económica que los costos que tiene un proceso judicial, tanto en dinero como en tiempo pero sobre todo en esto último.

Un estudio realizado en Viedma con un equipo de mediadores se arribó a una alarmante conclusión: las causas por daños y perjuicios (accidente de tránsito por ejemplo) que se tramitaron en Tribunales en los últimos cinco años tuvieron una demora de cuatro años promedio, en el marco de todas las instancias que exige la gestión judicial.

En cambio la mediación propone que en un plazo de 10 días el caso tenga un mediador para facilitar el diálogo entre las partes y que intenten en esa negociación llegar a un acuerdo. A través de este sistema el trámite de una causa por daños y perjuicios se puede extender como máximo 90 días.

Además los honorarios del mediador y los letrados que deben concurrir a la mediación son significativamente más bajos que los aranceles previstos para la actividad judicial.