Marcos Acuña, un todoterreno que hasta puede ser capitán
El Huevo fue una de las figuras en el amistoso donde Argentina goleó 6-1 a Ecuador. Además, lució la cinta que Pezzella le cedió a diez minutos del final.
Fue un amistoso sin equivalencias entre dos seleccionados que están en período de renovación y prueba. Dentro de este escenario fue Argentina el que se mostró mejor armado en su propuesta, con un ataque voraz que encontró facilidades en la zaga ecuatoriana y consiguió hacer valer su poderío ofensivo cada vez que pisó el acelerador en el desarrollo.
El 6-1 final en Elche (España), sede del ensayo, no deja de ser un empujón anímico para el cuerpo técnico y jugadores de cara a las dos citas que se vienen para el 2020: las Eliminatorias mundialistas y la Copa América. Dentro de las certezas que se lleva el DT Lionel Scaloni de esta doble fecha FIFA está la confirmación de algunos jugadores que ya son la columna vertebral de la renovación. Entre ellos está el zapalino Marcos Acuña.
El Huevo, clave para dar vuelta la historia en el ST ante Alemania en Dortmund, fue titular esta vez contra Ecuador y su actuación lo reafirma aún más en el grupo albiceleste. El zapalino es parte de ese eje central que componen además Leandro Paredes, Lautaro Martínez y Rodrigo De Paul como engranajes insustituibles en la maquinaria de Scaloni.
Acuña, que ayer reemplazó a Nicolás Tagliafico por el lateral izquierdo, mordió, se proyectó y jugó, a tal punto que fue el gestor de los tres primeros tantos del seleccionado. A los 19’ metió el centro para un nuevo gol del Pipa Alario; 8’ después envió otro centro desde la izquierda que se desvió en Espinoza y descolocó al arquero Ortíz; y a los 31’ asistió a Lautaro en el área, quien fue derribado, para que luego Leandro Paredes pusiera las cosas 3-0.
Germán Pezzella (20’), Nicolás Domínguez (37’) y Lucas Ocampos (41’), como ante Alemania, fueron los otros goleadores de la selección, que de a poco comienza a tener nuevos nombres propios. Incluso para los portadores de la cinta. Pezzella fue el capitán y cuando fue reemplazado a los 36’ del ST, le dio el estandarte al Huevo Acuña en un hecho histórico para el jugador nacido en Don Bosco de Zapala.
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