Mañana comienzan las clases en un secundario neuquino

NEUQUEN (AN).- El Centro Provincial de Enseñanza Media número 69 (CPEM) del barrio Cuenca XV se distinguirá de los demás colegios neuquinos cuando mañana abra sus puertas para que los alumnos vuelvan a clases.

A diferencia del resto de las escuelas secundarias, que darán inicio al ciclo lectivo el 8 de marzo, ésta comenzará con el dictado de clases a partir de mañana.

La propuesta surgió como iniciativa de la directora del establecimiento, Patricia Varela, y del equipo de docentes que trabaja junto con ella. «Creemos que empezar antes las clases es positivo para los chicos porque se van adecuando a los nuevos métodos de estudio y se integran con sus compañeros y profesores», comentó Varela.

El CPEM 69 empezó a funcionar en abril de 2003 como consecuencia de la gran cantidad de personas que no pudieron continuar con sus estudios por problemas económicos y familiares. El colegio nuclea a adolescentes y adultos de los barrios del sector oeste de la capital y funciona de tarde compartiendo lugar con la escuela primaria 347, porque aún no tienen edificio propio. La directora del establecimiento explicó que la matrícula se duplicó con respecto al año pasado. Dijo que recibirán a un total de 200 alumnos y aclaró que»no hay bancos disponibles».

El ciclo lectivo 2004 arrancará con cuatro cursos más que en 2003, y hay 20 personas en la lista de espera para ingresar al colegio.

La iniciativa que puso en marcha Varela el año pasado, se relaciona con el alto porcentaje de chicos que egresan de la primaria con sobreedad escolar. «Quiere decir que son jóvenes que terminan séptimo grado con 14 o 15 años», dijo la directora. Esto, continuó Varela, «lleva a que los chicos no le encuentren sentido a la escuela y a seguir estudiando, porque lo ven como un fracaso».

Estas conclusiones son resultado de un trabajo de investigación que Varela realizó en mayo del año pasado, junto con la asesora pedagógica del colegio. Hicieron recorridos por las distintas escuelas primarias de la zona y mantuvieron reuniones con sus directores y docentes. De esa forma lograron acercarse a las realidades de cada estudiante y pudieron diseñar las estrategias para empezar a cambiar esa situación.

Según explicó Varela, la idea de encarar el fracaso escolar y la violencia son dos estrategias frente a un mismo problema que comprende a una población marginal a la que se intenta integrar en el sistema educativo.

«Queremos trabajar el tema de los valores y que ésta sea una escuela en la que se pueda convivir sin violencia», señaló.

Las iniciativas de la directora fueron reconocidas con el Premio Estímulo que entrega anualmente el Consejo Provincial de Educación.