Maldonado: ahora frente al juez, un testigo responsabilizó a Gendarmería

Por primera vez desde el inicio de la causa, integrantes de la comunidad mapuche declararon ante el juez federal de Esquel Guido Otranto –fuera del anonimato, con nombre y apellido– haber visto que a Santiago Maldonado “se lo llevó la Gendarmería” el 1º de agosto durante un operativo de la fuerza en Cushamen, Chubut. Un misterioso informe supuestamente de inteligencia que recibió la Procuvin apuntaría contra la fuerza, pero en el gobierno lo tildan de falso.

Matías Santana, uno de los integrantes de la comunidad mapuche que declaró ayer ante el magistrado, dio una suerte de conferencia de prensa a la salida del juzgado federal de Esquel: “Yo vi cómo a Santiago se lo llevó Gendarmería”, aseguró. “Desde el 31, los gendarmes estaban en la zona, pero fue al otro día a la mañana que deciden ingresar a nuestro territorio. Entraron reprimiendo a los integrantes de la comunidad, con armas y con una balacera”, sostuvo Santana y manifestó que tuvieron que replegarse “hasta el río. Yo para escapar agarré un caballo y crucé el río hasta subir a una loma. Santiago alcanzó a tirarse al río, pero después se volvió”.

Luego afirmó que “desde la loma pude ver con unos binoculares cómo tres gendarmes golpeaban a un bulto que tenía una campera celeste, una campera que yo le había prestado a Santiago esa misma mañana Después de que le pegan, cargan el bulto y lo llevan hasta un Unimog, que luego pasan a una camioneta blanca que se dirige por la ruta 40 rumbo a Esquel”.

El jueves pasado la Procuraduría de Violencia Institucional (Procuvin) recibió un informe anónimo, supuestamente de inteligencia, que indica que Maldonado murió de hipotermia bajo detención de Gendarmería y que luego su cuerpo fue arrojado en la frontera con Chile. El informe está bajó análisis del juez y la fiscal, pero no pudo darse como fidedigno. En Seguridad lo calificaron como una operación de la procuradora Alejandra Gils Carbó.

Por ahora, según afirmaron fuentes de la querella a este diario, las pruebas que apuntan contra Gendarmería se limitan a los testimonios y videos en los que sus familiares y miembros de la comunidad identifican a Maldonado como uno de los encapuchados; certificarían además la presencia de camionetas de Gendarmería en la zona donde habría desaparecido el joven. Con la prueba de ADN, quedó descartada la hipótesis de que el herido por un puestero de Benneton fuera Santiago. Y aún faltan los resultados del análisis de los restos encontrados en camionetas de la fuerza.

Santana es uno de los testigos que ya habían declarado en la Procuvin, pero que lo habían hecho encapuchados y como anónimos. “El miedo se terminó. Antes no teníamos garantías para declarar. Ahora tenemos el apoyo de toda la sociedad. A nosotros nos cuidan las personas que salieron a las plazas, y nuestro pueblo”, dijo el joven mapuche.

Otra de las integrantes de la comunidad que declaró ayer, Soraya Maicoño, negó, como comunicó la fiscal Ávila el 28 de agosto en un informe al Ministerio de Justicia, que la misma comunidad había impedido continuar con los rastrillajes del otro lado del río Chubut, donde se perdía el rastro: “Revisaron el terreno con helicópteros y drones, pudieron recorrer a pesar de nuestro pedido de que no entraran a territorio sagrado, pero es mentira que obstruimos”, afirmó.

“Hubo maltrato

de las autoridades”

Sergio, el hermano de Santia-go Maldonado y representantes del Cels dieron una conferencia en Esquel y denunciaron “maltrato de las autoridades judiciales y políticas”.

Sobre la causa, Verónica Heredia, abogada de la familia, dijo “que básicamente no se hizo nada”. Además, aseguró que es falso que se tardó 3 días en denunciar la desaparición, sino que se consultó en Gendar-mería desde el primer día.