Cese de actividades en el Ministerio de Desarrollo Social
Los trabajadores de la delegación Bariloche se declararon en estado de alerta y movilización hasta el próximo viernes. Aseguran que el ministro Fabián Galli no les dio respuestas a sus reclamos.
Weretilneck quiso esquivar un reclamo de estatales
El gobernador Alberto Weretilneck pasó un mal momento en el acto de inauguración del tomógrafo en el hospital Ramón Carrillo. Debió permanecer varios minutos en el aula magna del subsuelo custodiado por policías mientras un grupo de trabajadores del Ministerio de Desarrollo Social reclamaba afuera, luego de un intento de omitir el reclamo el mandatario recibió el documento de los trabajadores.
Weretilneck fue sorprendido por el reclamo de los trabajadores que insistieron ante la falta de recursos en el Ministerio que conduce Fabián Galli, la situación de los becados y reiteraron el pedido de renuncia del ministro y el delegado del Ministerio en Bariloche, Juan José Deco.
El reclamo de unos 30 trabajadores con pancartas y banderas indicando la baja ejecución del preuspuesto para programas sociales y pedidos de renuncia de funcionarios, se produjo en el exterior del edificio cuando el gobernador se encontraba en el hall de acceso al hospital dialogando con la prensa. Por eso custodios de la gobernación impidieron el avance de los manifestantes y el mandatario se retiró al primer subsuelo al aula magna para presidir un acto, sin recibir a los trabajadores.
El mandatario quedó en el interior del aula magna por varios minutos ante el corrimiento de la protesta de los trabajadores al primer subsuelo y por eso desde allí fue retirado por una puerta de seguridad de la parte posterior del edificio. Tras un recorrido interno por el hospital seguido por los manifestantes, finalmente el gobernador recibió el documento con el planteo de los trabajadores de Desarrollo Social que entregó en mano la dirigente de ATE, Úrsula Caracoche.
El gobernador prometió “evaluarlo y analizarlo”, luego de que minutos antes había dicho a la prensa que “no hay crisis en Desarrollo Social, es la postura de ATE de siempre, ATE en el lugar donde puede ir a generar conflicto, agravios a dañar edificios y a pedir renuncias es la costumbre que tiene, crisis no hay ninguna, el Ministerio funciona con normalidad”, dijo.
Weretilneck dijo que los reclamos en el organismo provincial son parte del “modus operandi” del gremio ATE.
El gobernador insistió que existe el diálogo en Desarrollo Social porque la semana pasada el propio ministro Fabián Galli llegó a la ciudad para mantener una reunión con los trabajadores ante un conflicto interno e insistió que el ministerio tiene 300 empleados en Bariloche al minimizar la cantidad de personas que encabezaron hoy el reclamo.
Respecto a la presentación del tomógrafo para el hospital de Bariloche, manifestó: “Es un hecho histórico para la población de Bariloche y la región. Se trata del primer tomógrafo instalado en un hospital público después de muchos años. Nos da la satisfacción de poder poner a la salud pública en el mismo nivel que la medicina privada. Ya no habrá que derivar pacientes a los institutos privados. Pero además, este aparato permite la inmediatez en los estudios. Genera un ahorro de 530 mil pesos por mes para este hospital”.
De manera posterior al ingreso al gobernador al hospital, se colmó de policías el edificio y se cortó el tránsito en la calle Elflein.
Llegó el ministro para calmar las aguas en Desarrollo Social
El conflicto entre los trabajadores del Ministerio de Desarrollo Social de Río Negro, con el delegado en Bariloche, Juan José Deco, alcanzó su máxima escalada esta semana, generando el desembarco del ministro Fabián Galli en la ciudad.
La tensa reunión entre el ministro y un grupo de trabajadores que, por segunda vez en el año, pidió la renuncia de Deco y la del coordinador del área de Protección, Nicolás Riquelme, se extendió por casi tres horas.
“Denunciamos violencia institucional hacia los trabajadores y hacia la población con la que trabajamos. Hoy, no contamos con módulos alimentarios, no hay subsidios para la gente desocupada, no hay alojamiento para la gente en situación de calle, ni para las mujeres que sufren violencia de género. Hay un programa para mujeres golpeadas y no tenemos cómo asistirlas. A una mujer se la mandó con sus hijos a un lugar donde había ratas y no tenía baños”, comenzó planteando Úrsula Caracoche, trabajadora del Ministerio de Desarrollo Social y secretaria adjunta de ATE Bariloche.
La lista de reclamos continúa. Caracoche agregó que no hay un Centro de Atención Integral para Niños y Adolescentes (Caina) para varones adolescentes y que varios programas que no están funcionando, como La Esquina, Libertad Asistida, Acompañante, Defender la alegría, y Adultos Mayores.
“Los trabajadores tampoco contamos con cospeles. De modo que si necesitamos transitar 15 kilómetros, no tenemos cómo llegar. De los coches que envió el gobierno, uno lo usa el delegado en forma personal y el otro lo chocaron y nadie sabe dónde está”, recalcó Caracoche.
A pesar de las críticas, Galli ratificó a los dos funcionarios cuestionados en sus cargos. “Aproveché para escuchar a este grupo de 25 trabajadores (quiero aclarar que en total, la Zona Andina tiene 300) que plantea negligencia por parte del delegado, falta de compromiso, la no entrega de ayuda económica. Es decir, lo cuestionan por todo. Pero cuando un grupo quiere tener la verdad absoluta es difícil dialogar”, dijo Galli.
Al término del encuentro, los trabajadores pidieron una nueva reunión con el ministro aunque remarcaron que hoy en asamblea, definirán si llevan a cabo o no una retención de servicios.
“Acá hay una cuestión netamente gremial o política. Ojalá tomen otra decisión para no dejar de asistir a tantas familias. Hemos encontrado casos en los que no se hace un seguimiento de las familias en forma permanente”, agregó Galli.
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