Las ‘joyitas’ y otro cruce de los Andes

NEUQUÉN (AN).- Ni un terremoto, ni las cenizas volcánicas o la nieve pueden frenar la pasión de los entusiastas de los autos de colección en su fervor por surcar los serpenteantes caminos cordilleranos. Así, una vez más, los hombres que aman a las joyitas mecánicas se preparan para un nuevo Cruce de los Andes.

Como en las ediciones anteriores, marzo es el mes elegido y el cual quedo establecido institucionalmente para realizar este evento del que participan 60 vehículos de ambos países y que tiene una importante difusión nacional e internacional y es organizado conjuntamente por los Clubes de Autos Antiguos, Clásicos y Especiales de la Patagonia y del de Chile.

Los días 16, 17 y 18 de marzo, estos autos serán admirados en Puerto Montt, Puerto Varas, Puerto Octay , Frutillar, Osorno, el famoso Museo de Studebaker en Moncopulli y concluirán su derrotero en la aldea de montaña de Villa La Angostura, que como el mítico Ave Fénix, resurgió de las cenizas para superar todos los contratiempos ocasionados por el Volcán Puyehue.

En los años precedentes, este Cruce adquirió -principalmente en Chile- un inusitado interés tanto del Club homónimo como de las autoridades locales y regionales, tanto es así que se hicieron presentes en todos estos años en el acto de oficialización: gobernador, alcaldes de las distintas ciudades, legisladores nacionales y regionales, el presidente de Sernatur (Secretaria Nacional de Turismo) y el año pasado se contó con la participación efectiva del ex presidente Eduardo Frei, quien participó de la apertura de la actividad.

En esta ocasión, los adherentes de la actividad de ambos márgenes de la cordillera, lejos de evitar la castigada localidad y trasladar el evento a otras regiones y pasos fronterizos, ratificaron su decisión de acompañarla mas que nunca y como en todas sus ediciones, será el punto de egreso, ingreso y llegada de este encuentro binacional que abre el Campeonato Interpatagónico que este año tendrá la categoría de Internacional , y será el único en su tipo en el continente americano, solo se desarrolla en Europa en similares condiciones. Así como los deportes juveniles tienen en los Juegos de la Araucanía su proceso de integración, los autos clásicos tienen su unión consolidada por la cordillera, la cual lejos se constituirse en un obstáculo, se transforma para estos coleccionistas en el punto geográfico de un nuevo encuentro de los países.

Participarán 60 vehículos de más de 28 años.