La Trochita: a 75 años del primer viaje de Jacobacci a Esquel del tren a vapor
El legendario trencito a vapor unió por primera vez Jacobacci con Esquel el 25 de mayo de 1945. Hasta medidados de la década del 90 cumplió un servicio social muy importante para los pueblos del sur rionegrino.
Un día como hoy, pero de 1945, la formación de La Trochita unía por primera vez la ciudad rionegrina de Ingeniero Jacobacci con chubutense de Esquel.
Más de doce horas demandaron a este pintoresco «trencito», unir los 402 kilómetros del tendido férreo, calificado como una “obra de arte” de la ingenieria ferroviaria.
Durante muchos años, las viejas locomotoras Baldwin y Henschel, contruidas en 1922, remolcando vagones de pinotea, transportaron a miles de pobladores, principalmente del sur de la provincia de Río Negro y el oeste chubutense en viajes de negocios, médicos y simplemente recreativos.
También la lana, animales, alimentos, encomiendas y cartas tenían a este importante medio de transporte para ser trasladados de un lugar a otro.
El ramal de la “trocha angosta” le dio vida a pueblos como Ojos de Agua, Mamuel Choique, Río Chico, Ñorquinco y El Maitén, además de las localidades cabeceras.
A lo largo de sus 402 kilómetros, el trazado férreo incluye más de 640 curvas que sortean cerros, valles y mesetas, ubicadas entre los 600 y 1200 metros sobre el nivel del mar.
El paisaje combina escenarios áridos y poco explotados, de la típica meseta patagónica, que van cambiando a medida que el tren se acerca a la cordillera.
Al llegar a Río Chico, donde el valle solo deja espacio para que se encajone el curso de agua, las vías desembocan en un puente Bayle de 105 metros de largo, junto al túnel de 108 metros que se encuentra a continuación y que son las obras de arte más importantes del trazado.
En febrero de 1999, el ramal de la trochita fue declarado Monumento Histórico Nacional.
Pero todo cambió muy rápido. A mediados de la década del 90, durante el gobierno del ex presidente Carlos Menem, el proceso de privatización de las empresas del Estado, terminó con el cierre de este ramal al que se lo consideró “deficitario”.
Fue a mediados de 1994 cuando hizo su último viaje entre Jacobacci y Esquel.
A partir de allí, Chubut reflotó el ramal con fines turísticos bajo el nombre de “Viejo Expreso Patagónico” y en Río Negro hubieron viajes periódicos con turistas extranjeros.
Hace dos años, en el marco de un proyecto impulsado por el Ministerio de Turismo de Río Negro, el Tren Patagónico y el Ente de Desarrollo de la Región Sur, al vieja formación del «trencito a vapor» volvió a funcionar en forma regular, uniendo Jacobacci con Ojos de Agua.
Este verano, hasta que se decretó el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio, La Trochita venía cumpliendo una exitosa temporada turística, realizando viajes semanales con pasaje completo.
La temporada marcó el regreso definitivo de esta formación ferroviaria que despierta un gran interés turístico en el mundo.
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