Gamers

Quienes hacen culto forman una comunidad en la que no hay diferencias de edad. Todos están pendientes de las novedades de la industria. Los pormenores de esta singularidad que en Neuquén despierta la atención de cientos de aficionados.

Llevar a tu equipo favorito a conquistar el campeonato de las mejores ligas del mundo, pelear en primera persona en la segunda guerra mundial y destrozar a los nazis, vivir aventuras impensadas en una ciudad lejana, todo es posible gracias a los videojuegos. Los gamers neuquinos forman una comunidad silenciosa pero constante, que juega y vive aventura. En estos días salen a buscar los lanzamientos del año nuevo en busca de diversión.

Los jugadores están pendientes de las preventas y en la ciudad los más buscados son el Fifa 2018, el Pro Evolution Soccer 2018 (conocido como PES 18), el Call of Duty World War II, Grand Theft Auto V (abreviado como GTA 5) y el clásico y eterno League of Legends (también conocido por sus siglas LoL).

“Despachamos todo lo que los youtubers venden. En la ciudad hay muchas comunidades gamers con gente especializada en diferentes juegos. El League of Legend, que es uno de los más jugados en PC, mueve millones de dólares en el mundo. Se hacen torneos. Para dar una idea, hizo un mundial el año pasado y lo vieron en vivo más personas que al mundial del fútbol”, contó comentó Matías Peralta de la tienda de juegos MTS y un pionero en el mundo gamers de la ciudad.

Los gamers de hoy, los equipos que más eligen para jugar son las Xbox one, Play 4, nintendo switch y la Pc. La consola tiene un precio cerrado y las de última generación están entre 9.000 y 15.000 pesos. En cambio armar una buena computadora que sirva para todos los juegos puede llevar de 14.000 pesos hasta 100.000 pesos. A su vez, en accesorios, el gasto puede llegar a no tener límites.

Cada juego tiene una moneda con la que se pueden comprar tarjetas para cargar los puntos con los que comprar ropa, jugadores. Para jugar on line en la PC se pagan membresías por mes. Arrancan en los 270 pesos, que son 10 dólares de videos juegos y llega hasta el infinito.

“Por ejemplo los Google play, son dólares de Google que se cargan y con eso compran cosas. Vendemos todas las criptomonedas, de todas las consolas de nintendo de playstation. También las de Facebook que las compran las empresas que quieren promocionar su empresa. Vendemos todo y somos los únicos que las tenemos”, dijo Matías.

Según relataron en las casas de venta de juegos, los chicos arrancan a los 5 años a jugar pero la edad fuerte de los gamers ronda entre los 30 o 35 años. Por lo general, se trata de personas que tienen independencia económica, trabajos estables, a veces, todavía no formaron una familia y tienen gran capacidad de consumo. En el caso de los adolescentes, son muy jugadores pero dependen de la economía de los padres.

Los expertos sostienen que si bien es cierto que están todo el día adentro de la casa, los gamers interactúan con personas a los que llaman amigos.

“Entablan relaciones, hacen cosas en equipo, hablan, discuten. Los adultos llegan a una relación real y se pueden juntar a comer un asado, pero el 90% está en comunidad virtual. Con un micrófono, unos auriculares y un traductor, de repente hablan con un ruso de manera sencilla”, dijo Matías.

En la zona todos se comunican por Internet, porque los juegos tienen chat. También lo hacen por redes sociales, por grupos de watysap. Hay eventos y torneos que organizan las casas que venden insumos y son en vivo. De ellos participan entre 100 personas, y siempre se quedan cortos. Algunos son gratuitos y hay otros pagos con premios que llegan a los 5.000 o 10.000 pesos.

Ya sea en vivo, o conectados por la red, todos confluyen ante las consolas para quedarse. Nadie grita “piedra libre para todos los compas”, ni gasta energías en correr hasta un arco, pero se divierten a su manera y conquistan un mundo virtual en segundos.

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Algunos valores

Un joven de 17 años
es el gamer mejor pago gracias a un contrato
de 150.000 dólares por jugar en la liga de Overwatch, un desafío de disparos en equipo.

La ordenanza que lleva el nombre de Don Jaime

Los videojuegos en la historia de la ciudad generaron fuertes discusiones entre los actores sociales. En 1982, con el apoyo del obispo Don Jaime de Nevares, se sancionó la ordenanza 1707 aún vigente que prohibe los juegos electrónicos, electromagnéticos y eléctricos en el municipio de Neuquén Capital.

Al leer los considerandos se encuentran frases muy alejadas de la realidad actual, como “que sus sistemas de luces, sonidos y operaciones simultáneas absorben a los usuarios y hasta pueden crear un estado de dependencia, una nueva forma de vicio. Que las máquinas de marras llegan a generar deposición, éxtasis y otros fenómenos psiconerviosos”.

En 1987, se modificó para permitir la habilitación de “un salón de esparcimiento para niños con juegos de movimientos mecánicos”. En agosto del 2016, presentaron la solicitud de licencia comercial por vía de excepción para la apertura de un local de simuladores de carreras.

Hoy la ciudad tiene varias salas de juegos, con simuladores, o para niños.

Allí, los adolescentes y los más pequeños pasan horas conectados a las pantallas. En Calle Mitre, en el bajo, Mara Fernández atiende una sala de juegos que abrió hace poco.

Contó que los chicos entran al local desesperados por sus tarjetas y van cambiando de un juego a otro.

Muy lejos quedó el tiempo en que los videojuegos se veían nocivos para los niños. Según los analistas, en la sociedad actual funciona como niñera y los padres se hacen dependientes de las consolas para entretenerlos. Según los vendedores, los padres se quejan pero forman parte, porque no los dejan salir y dependen de eso para entretenerlos.

En este caso, es muy importante la influencia de los youtubers. Ellos mueven el mercado mundial. A lo que juegan y lo que ellos tienen, es lo que piden los chicos desde los 4 años.

pesos es el precio más bajo de los juegos de PC, porque el de otros más complejos llega a 2.000.

200

Datos

800
pesos es el precio más económico al que se pueden conseguir en plaza los
teclados y los mouse.
10.000
pesos puede costar una silla gamer en la que se puede
estar varias horas sentado.
40.000
pesos pueden valer los simuladores de manejos. Son los que usan pilotos profesionales para entrenar
y tienen un realismo perfecto.
Un joven de 17 años
es el gamer mejor pago gracias a un contrato
de 150.000 dólares por jugar en la liga de Overwatch, un desafío de disparos en equipo.

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