La confluencia de los ríos Neuquén y Limay suma un segundo paseo náutico

Neuquén posee tesoros naturales que cada año atrae a visitantes de todo el mundo. Pero no sólo están en los puntos turísticos, sino que la riqueza se puede encontrar en la barda, en los ríos, en la fauna que habita la zona. La forma de valorarlo es crear actividades para que las personas accedan a estos espacios como la nueva propuesta de navegación por la confluencia de los ríos.

La nueva forma de recorrer los ríos Limay y Neuquén la ofrece la empresa Tecim-econavegación que brinda una nueva actividad náutica. Las salidas se realizan los fines de semana a partir de las 14 desde las dársenas del Paseo de la Costa. Además se pueden programar salidas durante la mañana o en la semana. El paseo comienza con la navegación en el río Limay con una lancha semirrígida que tiene un motor de 4 tiempos, es decir que no contamina el agua.

Los colores amarillos y naranjas que acompañan la llegada del otoño se reflejan en las hojas de los árboles que rodean el caudal de los ríos, los biguás se posan en sus ramas. Se pueden ver a los pescadores probando suerte con algún pique de trucha, hasta llegar a la confluencia de los ríos Limay y Neuquén, un espacio que pocos neuquinos conocen y que forma parte de nuestra identidad.

“Este proyecto nace a través de dos neuquinos, en otros países navegan por canales artificiales, ¿cómo nosotros no vamos a aprovechar nuestros ríos y espacios naturales?”, explicó Eric Cima, trabajador de Tecim.

En el recorrido se divisa la isla de las aves un espacio elegido por las garzas blancas, biguás y garzas moradas, también se ha visto la nutria de río que se encuentra en peligro de extinción.

Incluso se pueden ver jotes de cabeza colorada que visitan la zona en su vuelo migratorio y se van al terminar el otoño. La lancha se dirige hacia la Isla Jordán, por el caudal serpenteante del río Negro que muestra las bardas y orillas repletas de aves. Se ven los cisnes y patos que se bañan en una península con poca correntada, rodeados de una vegetación densa que destaca la ausencia humana.

Cuando el paseo está en el último tramo, se bordea la isla 132 que ofrece una perspectiva diferente del balneario Río Grande y la urbanidad de Neuquén. Por último navega por un brazo del río Limay que ofrece la vista de la Isla Verde, otro espacio privilegiado de la naturaleza. El recorrido de una hora ofrece una visita por puntos inexplorados de Neuquén y maravillarse con la naturaleza pura.

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• Cuatro meses lleva Tecim navegando la confluencia de los ríos. Comenzó en noviembre.
• Cinco son los lugares visitados: Isla 132, confluencia de los ríos Limay y Neuquén, Isla de las aves, Isla Jordán e Isla Verde.
• Una hora: es la duración que tarda el recorrido por los ríos de Neuquén.
• Seis especies: en el recorrido se ven biguás, garzas blancas, patos, cisnes de cuello negro, garzas moradas y jotes.
• Los cisnes de cuello negro se posan sobre el río Neuquén porque ofrece una mejor disposición de alimentación para su subsistencia.