Bajo el agua, vecinos de las 60 viviendas exigen obras al Municipio de Roca
Sufren cada vez que llueve. Piden una solución integral al problema de las inundaciones, mantenimiento del desagüe, desmalezamiento y obras de bacheo. “Nos sentimos abandonados”, dijo una vecina.
Hace años que los vecinos de las 60 Viviendas sufren de graves inundaciones, pérdidas de muebles, electrodomésticos y daños estructurales en sus hogares.
El 20 de febrero, este sector fue uno de los barrios más complicados de Roca debido a las crecidas en los drenajes pluviales que existen sobre la calle José Ingenieros, frente a las vías del tren, entre las calles Jujuy y Viedma.
Frente a esta situación, las familias más afectadas se organizaron para tomar cartas en el asunto y presentaron notas demandando la intervención del Municipio de Roca, con el fin de evitar posibles consecuencias de las próximas lluvias que asoman en la región.
“Esta es la segunda vez que se inunda todo el barrio. No nos sentimos escuchados por el Municipio de Roca”, expresó Vanesa, una de las vecinas que vive frente al desagüe del barrio, sobre calle José Ingenieros.
La indignación es compartida entre las 60 familias, quienes mantienen conversaciones colectivas, para sostener los reclamos ante las pocas tareas de mantenimiento.
En septiembre del 2021, mediante una nota dirigida hacia la intendenta María Emilia Soria, se manifestaron y exigieron una solución “definitiva” a los graves problemas que les ocasionan las lluvias.
“Solicitamos el revestimiento del desagüe, ya que día a día se va desmoronando y disminuye la superficie útil del mismo”, describió el escrito.
Este pedido se sostuvo a partir de que, según los vecinos, la ejecución de esta obra les permitiría un desagote más rápido y evitaría las inundaciones en los hogares tal como ocurrió hace pocas semanas y en el 2021.
“El 21 de abril del año pasado, muchos vecinos debimos abandonar nuestras casas, autoevacuándonos por varios días y sufrimos múltiples pérdidas materiales”, ejemplificó la nota.
El poco drenaje en las calles que se encuentran frente al desagüe complican la circulación del agua, a raíz de la abundante cantidad de malezas y “totoras” que se encuentran en el lugar.
Además, entre los pedidos expresados ante las autoridades municipales, manifestaron que el contexto de inundaciones continuas generó desbordes cloacales que van en detrimento a la calidad de vida de los habitantes.
Los olores nauseabundos que provienen del desagüe también provocan la proliferación de insectos y un contexto de insalubridad generalizada.
“Caen dos gotas y nos empezamos a preocupar desde nuestros trabajos porque el agua de la lluvia y de las cloacas se nos mete adentro de nuestras hogares. Somos trabajadores, algunos vivimos el día a día, sin trabajo estable y nos indigna mucho que no se tomen medidas. No queremos seguir perdiendo nuestras cosas”, se lamentó Vanesa.
Ante este escenario, las familias denunciaron “poco interés” para brindar una solución integral, la cual pueda resolver esta problemática.
“Tenemos tanto miedo que cuando llovió ayer, nos escribimos enseguida entre los vecinos para saber cómo estábamos. No pudimos ni respirar por los fuertes olores que se generaron”, concluyó la vecina.
Comentarios