La antorcha olímpica encendió la polémica en Bariloche

La antorcha olímpica encendió la polémica en Bariloche

La antorcha olímpica generó un cortocircuito entre el gobierno municipal y el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Sergio Capozzi, titular de la Fundación Pensar de Bariloche, cuestionó que la antorcha “tendría que haber llegado a Bariloche este fin de semana pero no fue así porque el municipio, alegando problemas presupuestarios, declinó la oferta que el jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires Horacio Rodríguez Larreta le había hecho”.

La llama que se transporta en dos contenedores especiales y nunca se apaga, comenzó a recorrer el territorio argentino el 5 de agosto. Comenzó en Buenos Aires, sede de los Juegos Olímpicos de la Juventud (que, primera vez, que se realizan en el continente americano), pasó por Puerto Iguazú, Salta, Jujuy, Catamarca, Tucumán, Córdoba, Mendoza, La Rioja, Neuquén, para seguir por Ushuaia y por primera vez en la historia llegar a la Antártida.

Valentina Muñoz, de la localidad de Maquinchao, campeona argentina en ciclismo viajó a Grecia junto al ganador de la medalla de oro, Walter Pérez, para encender la antorcha del evento ecuménico más importante organizado por el Comité Olímpico Internacional.

Capozzi, consejero del Comité Olímpico Argentino, reconoció que “desde hace un mes estaba organizando aspectos de la recepción que los atletas olímpicos rionegrinos estuviesen presentes al igual que los jóvenes ya que es una oportunidad única para ver y acariciar ese símbolo de paz que difícilmente vuelva a la ciudad”.

“No sé cuánto podría demandar la recepción de la antorcha, aseguró Capozzi, seguramente muchos empresarios y dirigentes habrían estado de acuerdo en solventar es inversión que nos habría puesto en la vidriera mundial, como Bariloche se merece”.

Carlos Arrative, secretario de Deportes de Bariloche, explicó que “la gente del gobierno de Buenos Aires viene armando este tour desde hace meses, con un productor como intermediario. Pero nunca se bajaron de los requerimientos. No eran imposibles de cumplir pero el beneficio era solo para ellos”.

El funcionario municipal puntualizó que pedían camionetas blanca pero de una marca particular que era sponsor, gráfica con el logo de los Juegos y del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, el pago de los pasajes y alojamiento y también exigían el cierre de la calle Mitre durante varias horas. “Todo sin difusión ni publicidad”, dijo Arrative.

“Nos pedían, por ejemplo, seguridad privada por seis cuadras de la calle Mitre y si eran policías debían estar de civil”, señaló y agregó: “Eran imposiciones que no beneficiaban en nada a Bariloche y todo a costo nuestro. Decenas de miles de pesos para un evento de una hora y para que solo se vea una marca. Las escuelas de iniciación deportiva de la provincia no sabían nada del evento al igual que las federaciones de las distintas disciplinas”.