Una concesionaria de Neuquén vendió un auto sin documentación y fue multada por la justicia de Cipolletti

El hombre de Cipolletti demandó a la concesionaria de Neuquén porque no le brindaron la documentación. El auto le costó más de cien mil dólares.  

En Cipolletti, un hombre compró un auto de cien mil dólares, lo retiró, pero estuvo más de un año sin poder utilizarlo porque la concesionaria Sahiora S.A de Neuquén no entregó la documentación correspondiente. El hombre promovió un juicio y consiguió una solución al problema.  

La justicia ordenó que el propietario sea indemnizado por la concesionaria por haber dilatado injustificadamente la entrega de la factura del vehículo. El fallo consideró que hubo un cumplimiento defectuoso o tardío por parte de la concesionaria de su obligación de emitir y entregar la factura de compra. 

A pesar de que el Chevrolet Camaro era cero kilómetro y recién lo había retirado de la concesionaria de Neuquén su propietario pasó meses sin poder circular. En el fallo explicaron que en un primer momento le entregaron unas patentes provisorias, pero había muchas irregularidades.  

El dueño sostuvo que comenzó a circular por las rutas de Neuquén y Río Negro, pero cuando se encontraba en la localidad de Plaza Huincul le aplicaron una multa por circular sin la documentación exigida por la ley. 

Los inspectores de tránsito pretendieron secuestrar el vehículo, pero lo evitó. Después de esa situación no lo volvió a sacar a las calles. En ese periodo intentó resolver el problema de los papeles con urgencia. Hizo gestiones en forma personal, telefónica y mediante reuniones con el presidente de la firma. Llegó a cursar tres intimaciones para hacerse de la factura y del resto de la documentación, pero continuaba sin obtener respuestas.  

El caso transitó las dos instancias en el fuero Civil de Cipolletti, pero la sentencia fue confirmada recientemente. El cliente probó que adquirió el vehículo en la concesionaria Sahiora S.A y que no le brindaron la documentación. Manifestaron que esa situación se traduce en lo que en el derecho de daños se denomina privación de uso.  

La vendedora del vehículo también recibió una multa civil por todos los problemas que se presentaron con la facturación y con la entrega de la documentación para formalizar la inscripción del vehículo ante la Dirección Nacional del Registro del Automotor. 

El damnificado contó 291 días de indisponibilidad del coche, pero el fallo tomó para la indemnización un total de 100 días ya que se fijó el punto de partida desde el vencimiento del plazo otorgado en la intimación. 


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