Quieren que el divorcio sea un trámite administrativo: abogados de Neuquén rechazan el cambio

Lo propuso el gobierno de Javier Milei. "Desarticula todo el sistema judicial al no permitir un convenio regulador entre las partes", planteó el Colegio.

El Colegio de Abogados y Procuradores de Neuquén emitió un comunicado en el que manifiesta su rechazo al proyecto de ley enviado por el Poder Ejecutivo nacional que busca implementar un «divorcio administrativo». «Falla al no reconocer la complejidad y las significativas consecuencias legales y personales del matrimonio», afirmó Marcelo Iñiguez, presidente de la organización.

La iniciativa presentada en el Congreso por la gestión de Javier Milei incorpora a las actuales causales de disolución establecidas en el artículo 435 del Código Civil la disolución del vínculo matrimonial en sede administrativa.

Establece textualmente que: «El matrimonio se disuleve por divorcio en sede administrativa, equiparado en cuanto a sus efectos con el divorcio declarado judicialmente».

En los fundamentos se sostiene que el proyecto: «permite a los cónyuges terminar su vínculo matrimonial de la misma manera que lo iniciaron: de mutuo acuerdo y ante el oficial público encargado del Registro de Estado Civil y Capacidad de las Personas, con un simple trámite administrativo».

Según este Colegio, «el matrimonio, por ser un acto jurídico complejo, no puede disolverse eficazmente mediante un procedimiento administrativo debido a la necesidad imperativa de resolver los efectos personales y patrimoniales entre las partes, incluyendo los relacionados con la pareja, los hijos, y los créditos y deudas de la comunidad matrimonial».

Para Iñiguez: «El divorcio administrativo desestima la complejidad del matrimonio y sus efectos, obligando a que todos los aspectos relacionados, tanto personales como patrimoniales, deban ser judicializados posteriormente. Esto no sólo desarticula el sistema, sino que incrementa innecesariamente la carga judicial«.

Un concepto desdoblado


El profesor de derecho de la Universidad de La Pampa, Gustavo Arballo, autor del libro «Brevísimo curso de derecho para no abogados», explicó los alcances de la iniciativa en la red social X:

«El punto clave aquí es que el concepto «divorcio» tal como se entiende en la calle en realidad se desdobla en dos cosas distintas: el divorcio propiamente dicho (que desde 2015 es incausado) y la (más compleja) disolución de la sociedad conyugal», aseguró.

Indicó: «La disolución de sociedad conyugal es obviamente más compleja y enroscada cuanto más bienes y flujo de gananciales haya en discusión. Esto NO queda cubierto por la modalidad «administrativa» de divorcio del proyecto. Será en tribunales y con abogados, necesariamente».

Advirtió en el hilo: «La disolución de sociedad conyugal es obviamente más compleja y enroscada cuanto más bienes y flujo de gananciales haya en discusión. Esto NO queda cubierto por la modalidad «administrativa» de divorcio del proyecto. Será en tribunales y con abogados, necesariamente».


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